Un bañista ya denunció a la Policía Local en 2002 la extrema velocidad de una 'pick up' en Maspalomas
El atestado sobre la muerte de una turista alemana en la arena de Playa del Inglés ha recaído en el Juzgado de Instrucción número 2 de San Bartolomé de Tirajana
Gaumet Florido y Francisco José Fajardo
San Bartolomé de Tirajana
Viernes, 6 de diciembre 2024, 01:00
La trágica muerte de una turista alemana, este lunes, atropellada, mientras tomaba el sol, por una 'pick-up' que prestaba servicio a uno de los kioscos de Playa del Inglés ha sacado a la luz las quejas de muchos usuarios por los riesgos que tienen para los usuarios el tránsito de este tipo de vehículos por la arena. Este malestar viene de atrás, desde muy atrás. Sin ir más lejos, desde 2002, cuando un usuario de la playa de Maspalomas, Eduardo Torres, presentó formalmente una denuncia en la Policía Local de San Bartolomé de Tirajana «por la velocidad extremadamente arriesgada» de una toyota 'pick-up' que también estaba en funciones de reparto de los kioscos.
Según recogía este bañista en su denuncia, a la que ha tenido acceso este periódico, se encontraba «junto a varios amigos y familiares» en la playa del Faro, «pasados unos 200 metros del kiosco número 7 en dirección a Playa del Inglés». Fue en ese punto cuando percibió que «un vehículo de reparto de los kioscos se aproximaba hacia ellos a una velocidad extremadamente arriesgada dada la cantidad de personas allí existentes, especialmente niños», y máxime cuando, según precisó este usuario en su denuncia, «el terreno no permite un control completo de la trayectoria del vehículo». Torres se quejaba también de que la 'pick-up' pasó muy cerca de él, «con una separación de unos tres metros».
Por fortuna, en aquella ocasión no pasó nada, al contrario de lo ocurrido este lunes, que se saldó con una muerte y con una investigación judicial que, en principio, asumirá el Juzgado de Instrucción número 2 de San Bartolomé de Tirajana. Ya tiene al menos en su poder el atestado de la Policía Local, que no especifica el delito que pudo haber cometido el conductor. Solo dice que, en todo caso, fue por imprudencia. El trabajador alega que ni la vio. Iba repartiendo mercancías a los kioscos, ya había avanzado al número 5, pero tuvo que volver al número 4, cerca del cual estaba la turista a la que atropelló.