Al rico platito de puchero en La Peña

Como viene siendo acostumbrado, el primer mandatario autonómico eligió participar en la romería de la Peña que contó con varias carrozas, entre las que destacó la de Antigua, cuyo alcalde Matías Peña llevó la carreta tirada por toros.

En la misa de este mediodía del tercer sábado de septiembre, que volvió a celebrarse fuera de la ermita, el obispo hizo dos llamamientos principales: a los jóvenes para que se alejen del «yo, yo y el disfrute, que es alimento del individualismo radical»; y a los ciudadanos en general para ayudar a las personas que se ven inmersas en el drama de la inmigración.

La misa terminó con la procesión por las calles de Vega de Río Palmas y con la entrega de una placa de reconocimiento al cura José Luis Cabrera Gil por sus ocho años de dedicación a los feligreses de Betancuria y Antigua.

Aunque no rigen las medidas sanitarias anticontagios, la costumbre de besar la imagen de alabastro de la Virgen de la Peña ya parece de otro siglo, por lo que este sábado se sustituyó por tocarla con la mano. Muchos feligreses y feligresas se animaron a hacerlo mientras el obispo José Mazuelos sostenía a la Virgen.

En el puchero colectivo, que como marca la tradición culinaria fue de carne de cabra, se usaron garbanzos, cebolla, puerro, pimiento verde, tomates, ajo, papas, calabaza, habichuelas, col mediana, calabacines, zanahorias, piña de millo, batata blanca, hierba huerto, tomillo, laurel y sal.

En primer lugar, se cortó la carne de cabra en trozos grandes para salarla. En un caldero con unos tres litros de agua se echaron los garbanzos (en remojo desde la noche anterior), la carne y la verdura picada junto con el tomillo y el laurel, dejando cocinar a fuego lento hasta que la carne esté bien hecha.

Mientras esto se preparaba, se cortó en trozos la col, las zanahorias, la batata, los calabacines y la calabaza, y una vez pasado el tiempo de cocción se añadió al caldero, junto con las habichuelas, la piña de millo y las papas, dejando cocinar durante un tiempo, detalló el Cabildo de Fuerteventura. Posteriormente, se añadió hierba huerto y se deja reposar una hora con el caldero tapado.