Un 'ahijado' de cinco millones de años: los Encantados
Patrimonio geológico ·
Amaifa apadrina el barranco de los Encantados, también llamado de los Enamorados, en Lajares, y lucha por frenar sus principales amenazas: las inscripciones y las motos de cross en las dunas fósilesMira a su alrededor y comenta: «Es un lugar tan especial». Carolina Cao habla del barranco de los Enamorados o de los Encantados, en Lajares, en el municipio de La Oliva. La Asociación Ciudadana de Activistas en Defensa de la Naturaleza Amaifa apadrina este yacimiento paleontológico, que es Bien de Interés Cultural (BIC) desde 2008.
Cao es la fundadora de Amaifa, que nació en 2020 a partir de una evidencia: el deterioro increíble del yacimiento durante los últimos diez años. El 'ahijado' tiene hasta siete figuras de protección, «pero siguen atentando contra sus valores patrimoniales naturales».
Además de BIC, los Encantados es, entre otras, Zona de Especial Protección para las Aves (Zepa), Área Importante para la Conservación de Aves (IBA) y está catalogado como suelo rústico de protección natural y paisajística.
Desde 2022, el Instituto Geológico y Minero, con Esther Martín González, doctora en Biología por la Universidad de La Laguna, le dio visto bueno al apadrinamiento del barranco a Amaifa. Se trata de un programa gratuito de voluntariado, que busca la conservación y seguimiento del patrimonio geológico español.
A partir de esta fecha, Amaifa empezó con sus actividades de protección y divulgación, que consisten fundamentalmente en impartir charlas de concienciación en los colegios y en, cada mes, mes y medio, ir a ver a tomar el pulso a su 'ahijado', comprobar si su deterioro sigue galopando sobre una moto de cross o a manos de un graffitero desaprensivo. «Si ese día que vamos coincidimos con senderistas, le recordamos la importancia del barranco y de su preservación. Con los motoristas hemos tenido más problemas, hasta el punto que alguno nos amenazó».
También recogen la basura que encuentran a lo largo del barranco. «Hasta el cárter de un coche encontramos una vez».
Contra las inscripciones y el paso de las motos de cross, ya poco se puede hacer. «Las ruedas dejan un surco en las dunas fósiles que hace que entre la humedad; y los graffitis no se pueden borrar, es decir no se pueden lijar porque nos podemos llevar media duna por delante».
Sólo se pueden frenar estos enemigos del barranco, bien a través de la vigilancia, que es escasa o casi nula, bien a través de la difusión de la importancia geológica y paleontológica del barranco. «Por lo menos, el Cabildo de Fuerteventura primero y el Ayuntamiento de La Oliva hace escasos meses ya ha colocado cartelería informativa».
Tanto despropósito contra los Enamorados no se entiende sobre todo, incide Carolina Cao Jiménez (1989, Donostia), si se piensa que Fuerteventura es la única isla que tiene Carta Paleontológica que elaboró el paleontólogo Francisco García-Talavera. «No se entiende si pensamos que hace 135.000 años aproximadamente, la actividad volcánica provocó la regresión de la costa, haciendo que el fondo marino, de unos cinco millones de años de antigüedad, quedase al descubierto y dejándonos este lugar».
Desde Amaifa se reconoce que los Encantados está «muy a trasmano», lo que dificulta el control de los desaprensivos, sea sobre dos ruedas, sea caminando.
Otros ahijados: Río Cabras por Avanfuer y Ajuy por la Telesforo Bravo-Juan Coello
Amaifa está poniendo los ojos en otro lugar de interés geológico y paleontológico: el barranco de Pecenescal, en el municipio de Pájara, al otro extremo de Fuerteventura. No en vano, el principal objetivo del colectivo es defender y cuidar los yacimientos paleontológicos, arqueológicos y geológicos.
En Fuerteventura, aparte de Amaifa con los Encantados, existen al menos dos apadrinamientos más por parte de colectivos. El primero de ellos es el barranco de Río Cabras, en el municipio de Puerto del Rosario, por la Asociación de Voluntarios de Ayuda a la Naturaleza de Fuerteventura (Avanfuer) desde 2017, que periódicamente realiza campañas de recogida de basura por tramos, avistamientos de aves y charlas divulgativas.
El segundo apadrinamiento es el Lugar de Interés Geológico (LIG) del delta de lava plioceno de Ajuy-Ensenada de La Herradura, donde se localizan las Cuevas de Ajuy. en el municipio de Pájara, por la fundación Telesforo Bravo-Juan Coello, de Tenerife, desde 2022.