Papas gratinadas, la guarnición perfecta con la que acompañar cualquier plato
Las recetas que te cuento ·
Ingredientes básicos, técnicas sencillas y muy poco tiempo de elaboración hacen de esta receta, el mejor acompañamiento
En casa somos «paperos», de toda la vida; fritas, arrugadas, sancochadas, al horno, en caldo o en puré. Diría que, muchas veces, a mi tribu les parece inacabado aquello que no lleve una buena tropa de papas.
En este contexto, no me queda otra que investigar, leer, buscar, hacer y probar, todas esas elaboraciones que lleven papas como protagonistas y, hacerlas gratinadas, basándome en esa receta francesa tan tradicional como replicada, ha sido todo un acierto.
Primero, porque no cuesta apenas tiempo ni técnica y de la cocción ya se encarga el horno, sin apenas ensuciar el resto de la cocina. Segundo, porque la textura final es sabrosa y delicada, así que no empaña a la carne o al pescado al que acompaña y, tercero, porque si la tribu está contenta, todos somos más felices ya que se encargarán de emitir su voto, en este caso favorable, cual jueces gastronómicos. Y les advierto que, aun habiéndolos traído al mundo, sus valoraciones son implacables.
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Tiempo de preparación
15 minutos
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Tiempo de cocción
30 minutos
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Tiempo total
45 minutos
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Comensales
4
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Calorías
Algunas
Categorías
Cocina francesa
Ingredientes
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500 g de papas
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Agua
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Sal gruesa
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Pimienta negra
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200 ml de nata (35% materia grasa)
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200 ml de leche
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100 g de queso para fundir
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80 g de cebolla frita deshidratada (opcional)
Paso 1: escaldamos
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Comenzaremos hirviendo abundante agua con un puñado de sal gorda y, cuando rompa a hervir, introduciremos las papas con su piel, durante 10 minutos.
Paso 2: pelamos
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Pasado el tiempo marcado, dejaremos atemperar para poder pelarlas sin quemarnos. Aprovecharemos para engrasar los moldes en los que se hará la cocción en el horno.
Paso 3: cortamos
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Seguidamente, cortaremos en rodajas de un centímetro de grosor, cada papa y las iremos colocando, sin sobreponerlas demasiado unas con otras, en los moldes o en un molde único, según prefieran.
Paso 4: calentamos
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En un cazo verteremos la nata y la leche y calentaremos, sin dejar que llegue a hervir.
Paso 5: integramos
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Mientras se calienta, mezclaremos bien con la ayuda de unas varillas, hasta integrar la nata con la leche y añadiremos un buen toque de pimienta negra.
Paso 6: cubrimos
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Cuando tome temperatura, retiramos del calor y bañamos las papas con la mezcla, solo hasta que las cubra, sin rebosar.
Paso 7: napamos
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Cubriremos con el queso rallado.
Paso 8: opción
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Y por último, como toque opcional, podemos espolvorear cebolla frita deshidratada por la superficie.
Paso final: horneamos y presentamos
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Introducimos en el horno, previamente caliente, a 180º durante 30 minutos, calor arriba y abajo. Pasado el tiempo de cocción, retiramos del horno y servimos sobre la marcha, acompañando cualquier otra elaboración, porque pega con todo.
