No hay signos de violencia en el cadáver de Paseo de Chil
Los forenses están a la espera de pruebas pero, en principio, no hallaron indicios identificables de que la mujer haya sido víctima de un crimen
Los especialistas del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses (Imlcf) de Las Palmas no han hallado signos identificables de muerte violenta en el cadáver de una mujer que encontraron el pasado martes en los jardines Rubió del Paseo de Chil, situado en la capital grancanaria.
En principio, los forenses responsables de la autopsia no hallaron indicios de que esta fémina hubiera sufrido una muerte de etiología criminal, aunque aún están pendientes de varias pruebas más para poder realizar un informe definitivo. Entre las diligencias pendientes está la de identificación de la víctima, que se encontraba en un avanzado estado de descomposición.
Para ello será crucial el trabajo de la sección de Antropología del propio Imlcf de Las Palmas que ha estudiado el cadáver para intentar concretar de quién se trata.
Tal y como avanzó este periódico, el cuerpo fue encontrado cerca de la fuente dedicada a León y Castillo. La alerta la dio un transeúnte que paseaba con un perro, al que llamó la atención un olor fuerte que emanaba de una especie de cavidad de difícil acceso y se adentró en ella.
Al lugar se desplazaron agentes de la Brigada de Policía Científica, que realizaron una inspección ocular del lugar de los hechos, unidades de bomberos que recuperaron el cuerpo y agentes de la Unidad de Homicidios que se hacen cargo de la investigación. En total, el operativo contó con una quincena de personas. En torno a las 19.00 horas el cadáver fue retirado y trasladado al Instituto de Medicina Legal.
El habitáculo donde apareció el cadáver quedó precintado pero la falta de vigilancia del lugar hace que esté expuesto a la entrada de curiosos.
Los jardines Rubió suelen acoger a personas sin techo y también han sido utilizados en algunos momentos para actividades de prostitución. El lugar se ha ido degradando con el paso del tiempo, pese a que en varias ocasiones el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha realizado campañas de limpieza y acondicionamiento.
La basura suele amontonarse en la loma ocupada por los Jardines Rubió.