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Una joven marroquí, que lleva viviendo desde 2010 en Gran Canaria y que es voluntaria de Cruz Roja, denuncia una agresión racista que tuvo un vecino contra una de sus hijas, de 10 años de edad y española, el pasado domingo en una calle de Santa Lucía de Tirajana. Asegura que el hombre, en estado de embriaguez, increpó a sus dos hijos por estar usando la bicicleta en la calle y se acercó a la niña con la intención de agredirla con una alfiler en la mano y al grito de «moros asquerosos», esta calle es mía».
En ese momento, su ex marido y padre de los dos niños, que es español y exmilitar, se metió por medio y le empujó para evitar que la cogiera, por lo que agresor terminó en el suelo debido a su estado, golpeándose en la cabeza, y tuvo que ser posteriormente contenido por dos de sus hermanos ante la agresividad que mostraba.
tanto el padre como el agresor acabaron en urgencias por lesiones y su otro hijo, de 12 años, con un ataque de ansiedad, detalla. La denuncia ya ha sido presentada ante la Guardia Civil, que se personó en el lugar de los hechos, al igual que una ambulancia.
Asegura que quiere hacer público este altercado porque desde que compró la casa en este lugar, en 2021, ha tenido problemas por su nacionalidad, ya que le han llamado «mora de mierda» en muchas ocasiones, pero no le había dado importancia hasta ahora, que han agredido a sus hijos.
«Quiero que la gente tome conciencia porque al fin y al cabo los niños son españoles de origen, aunque nadie tiene derecho a tocar a los niños sean de donde sean», lamenta aún con el susto en el cuerpo y con el temor de volver a salir con sus hijos a la calle.
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