Los padres de Madeleine aceptan contrastar su ADN con el de la joven polaca

La desaparición de la Madeleine McCann en 2007 en El Algarve (Portugal) conmocionó al mundo entero y a día de hoy continúa siendo un misterio. Los agentes nunca encontraron a la pequeña o restos que pudieran indicar su muerte, ni tampoco consiguieron esclarecer qué sucedió.

Dieciséis años después, Julia Faustyna, una joven polaca de 21, reclama su identidad tras varias coincidencias que la relacionan con la niña. A través de su cuenta en Instagram 'iammadeleinemccan' ha dado cuenta de las «pruebas»: explica que apenas tiene recuerdos de su infancia y que, cuando pregunta por ellos, en casa nadie le da explicaciones.

Por otro lado, Julia Faustyna -que actualimente vive en Alemania- ha intentado hacerse con una copia de su certificado de nacimiento, sin éxito, y presenta algunas marcas de nacimiento que parecen coincidir con las de Madeleine.

Su objetivo era el de contactar con los McCann, los padres Kate y Gerry, para comparar las muestras de ADN y salir de dudas. Según afirma, ha intentado contar su versión a varios cuerpos de policía, pero ninguno ha tomado en serio sus declaraciones. Una actitud que no solo desaprueba sino que le parece incomprensible, puesto que «al menos deberían investigarlo». Por ello, pide ayuda para costearse ella misma las pruebas. Este lunes, la pareja ha aceptado contrastar las pruebas.

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