La vacunación antigripal arranca con el objetivo de captar a los mayores

«Voy por el centro de salud mirando si hay pacientes mayores para traerlos y que se vacunen», confiesa la directora de la zona básica de salud de Alcaravaneras, Virginia Cabrera, en su primer día dedicada a la captación de las personas más vulnerables ante la gripe estacional.

La campaña de vacunación contra la gripe, que arrancó ayer en Canarias, será mucho más intensa que la de otros años; el objetivo, conseguir que el 75% de los mayores de 60 años y que, al menos, el 60% del personal sanitario se vacunen.

«Se pretende, en general, que la campaña aumente en un 20% la cobertura vacunal», explica Cabrera, que confiesa que, en realidad, la dispensación de la inmunización activa contra la gripe se inició en cuanto tuvieron los viales en el centro de salud. «Desde que llegaron las vacunas empezó la campaña domiciliaria. El enfermero va a domicilios a vacunar a la gente que no se puede mover», explicó la responsable de una zona de salud que tiene el mayor volumen de población envejecida de Gran Canaria.

De momento, Cabrera es optimista respecto a la posibilidad de que la campaña de vacunación sea un éxito. «La gente está respondiendo. Hay una lista de espera de dos semanas aunque la agenda se ha ampliado y se está vacunando desde las 8.30 de la mañana hasta las siete y cuarto de la tarde», afirma.

Así y todo, la responsable de la zona de salud reconoce que cualquier esfuerzo para evitar que estas personas vulnerables enfermen de gripe es esencial para prevenir que puedan sufrir al mismo tiempo el virus de la influenza y el nuevo coronavirus. «Esa es la razón fundamental para que se estimule aún más que la gente se vacune», comenta Cabrera.

«Captamos oportunistamente a la gente mayor que viene al centro para sacarse sangre, para el control del sintrom o a consultas presenciales; primero, por comodidad para ellos y también para reducir las posibilidades de que estén en un centro sanitario que, al fin y al cabo, es un lugar de riesgo donde pueden coger no solo el covid sino otra patologías», explica la responsable del área de salud de Alcaravaneras.

De hecho, para esquivar esta amenaza, además de citar de forma espaciada a los pacientes, el lugar donde se dispensa tiene un acceso independiente al del centro de salud para evitar que las personas de riesgo coincidan con el resto de los usuarios.

El enfermero Carlos Arocha gestiona la agenda de la campaña vacunal y ha percibido que este año los mayores de 65 años están «más preocupados por la vacunación antigripal porque están concienciados de que el problema del covid es importante y quieren estar protegidos».

No es el caso de Marisol Jiménez, una usuaria del centro de salud que se vacunó ayer. «Lo he hecho al igual que otros años. Siempre me ha sentado bien. Lo hago por cumplir y por mí, por mis nietos, por mis hijos y por todos. Dicen que este año es más importante. No lo sé pero, como lo hago todos los años, cuanto más pronto me lo quito de encima mejor», afirma Jiménez.

En todo caso, aunque la demanda crezca, vacunas no van a faltar. Este año la Consejería de Sanidad ha comprado el doble de dosis, 320.000 unidades, a las que se sumarán otras 60.000 aportadas por el Ministerio de Sanidad.

Las vacunas administradas son de cuatro tipos; Fluzone 0,7, destinada a mayores de 65 años residentes en centros sociosanitarios; Flucevax , para personal sanitario, sociosanitario y embarazadas; Vaxigrip, para menores de 65 con patologías de riesgo y Chiromas, para mayores de 65 años. «Esto te inmuniza para las gripes más fuertes previstas para este año, pero hay muchos otros virus porque va mutando», apunta Cabrera.

La vacunación antigripal se realiza con cita previa, llamando al 012 o a los números gratuitos 922470012 y 928301012.

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