La supervivencia al cáncer infantil sigue aumentando y se sitúa en el 82%

La Fundación Pequeño Valiente trasladó a sus voluntarios incluso a la isla de El Hierro para aprovechar la efeméride y concienciar a la población sobre los efectos que esta enfermedad.

En Gran Canaria, el escenario elegido para esta fiesta fue la plaza de Saulo Torón. Allí hubo un taller de maquillaje infantil, música en directo de Los 600 y la lectura de un manifiesto elaborado por la confederación internacional de asociaciones de niños con cáncer.

En el documento, que se leyó en distintos puntos del planeta, se incidió en la necesidad de potenciar la investigación de la enfermedad y reivindicó la figura olvidada de los acompañantes.

«Cuando un niño enferma, enferma toda su familia», indicó el presidente de la Fundación, José Jerez, que recordó que España registra unos 1.500 nuevos casos de cáncer infantil al año.

La buena noticia, añadió, es que la esperanza de vida de las criaturas afectadas por la enfermedad no deja de aumentar y actualmente, «con un diagnóstico precoz,el cáncer infantil se cura en un 82% de los casos», señaló el responsable de la Fundación que atiende a unas 300 personas en el archipiélago con pequeños con patologías oncológicas o con enfermedades raras.

Pequeño Valiente dispone de tres pisos en La Laguna, Las Palmas de Gran Canaria y Madrid, gracias al apoyo de varias empresas colaboradoras como RIU Hotels y Adriá Hoteles.

Estos recursos para las familias que se tengan que trasladar para recibir tratamiento, sobre todo desde las islas no capitalinas, están a punto de aumentar con la apertura de una casa-hogar construida Las Palmas de Gran Canaria y que dispone de nueve habitaciones, cocina, salón de juegos, de lectura y lavandería.

«Estamos dándole los últimos retoques. El día que se abra será muy especial. Llevamos años luchando para ello con la ayuda de tres cabildos, del Gobierno de Canarias y de varias empresas», dice Jerez ilusionado.

La Fundación ofrece a las familias y a las criaturas afectadas ayudas económicas y recursos alojativos, además de trabajadores sociales, psicólogos, fisioterapeutas, monitores deportivos y dietistas. «El objetivo, rodear al niño para que salga lo mejor posible», dice Jerez.

Cuanto más conocimiento hay sobre la enfermedad, más formas hay de combatirla. Por eso, una prioridad de la Fundación Pequeño Valiente es fomentar la investigación.

«Nos gustaría que se invirtiera más en investigación y que el cáncer en unos años sea un mal sueño y no existamos como ONG», confiesa el presidente de la fundación, José Jerez. La entidad, cada año, aporta una cuantía a la Fundación Cris contra el Cáncer, que fomenta el estudio de la enfermedad.