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El estrés podría estar detrás de los ataques al corazón

El estrés podría estar detrás de los ataques al corazón

Algunas de las causas que están detrás del estrés son la inestabilidad laboral, la inquietud social ante el futuro, el exceso de información o diversos acontecimientos de la vida personal, situaciones que, a veces inconscientemente, generan tensión.

Jueves, 1 de enero 1970

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El estrés podría estar detrás de entre el 20 y el 30% de los ataques al corazón, según ha informado el jefe del Servicio de Cardiología de HM Hospitales y del Centro Integral de Enfermedades Cardiovasculares HM CIEC, Francisco Javier Parra Jiménez, aludiendo a diversos estudios científicos publicados.

Algunas de las causas que están detrás del estrés son la inestabilidad laboral, la inquietud social ante el futuro, el exceso de información o diversos acontecimientos de la vida personal, situaciones que, a veces inconscientemente, generan tensión.

"El estrés obliga al corazón a trabajar más intensamente. Las coronarias que nutren al músculo cardiaco requieren mayor aporte energético. Además, la sangre se espesa y las arterias se vuelven menos elásticas; se acumulan así sustancias nocivas en su pared, de forma que la sangre circula con mayor dificultad. De esta forma, el mecanismo defensivo que destruye los trombos disminuye su efectividad y el sistema cardiovascular se vuelve vulnerable ante cualquier obstrucción y/o trombosis aguda o crónica de la placa aterosclerótica", ha explicado.

De ahí que, en ocasiones, el exceso de respuesta del sistema nervioso se asocia con trastornos en la conducción eléctrica del corazón y con una mayor vulnerabilidad a arritmias ventriculares y por ende a la muerte súbita. SÍNTOMAS DEL ESTRÉS

En este sentido, el doctor ha destacado la importancia de detectar el estrés, observando si se tiene dificultad para dormir debido a pensamientos o ideas preocupantes; se está irritado o impaciente ante pequeños problemas; se es incapaz para concentrarse o tomar decisiones; fumar y beber más de lo habitual; divertirse menos; incapacidad para relajarse; sensación de que siempre hay cosas pendientes; estar tensionado; y sufrir dolores de cabeza, cuello y musculares.

Una de las maneras que ayudan a identificar el estrés reside en su medición. "Existen varias formas. Una es la escala de Holmes y Rahe en la que se tienen en cuenta acontecimientos de la vida personal a los que se le otorgan puntuaciones, que sumadas, establecen dinteles de estrés y gradación del mismo. Así, la muerte de un cónyuge equivaldría a 100 puntos mientras que a un divorcio se le otorgan 75, a un despido laboral 45 y a un embarazo 40. Si la suma es inferior a 150, el riesgo de enfermar debido al estrés es bajo; si se encuentra entre 150 y 299 hablamos de riesgo moderado y alto si es igual a superior a 300", ha informado Parra.

Para enfrentarse al estrés, el experto ha aconsejado ejercicio físico, una adecuada alimentación y unos buenos hábitos de sueño. Además, prosigue, importante detectar los factores que llevan al estrés; usar técnicas de relajación el enfrentar un factor estresante; descansar adecuadamente, entre seis y ocho horas; planificar el tiempo; hacer, al menos, tres horas de ejercicio a la semana sin necesidad de que sean actividades extenuantes; seguir una dieta equilibrada y adaptada al estilo de vida; y acudir a un profesional si la situación continúa empeorando.

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