El Ministerio amplía la cartera de terapias avanzadas con la oposición de Canarias
Monzón alerta de que cargar a la comunidad con el coste de los pacientes obligados a tratarse fuera de las islas vulnera la equidad sanitaria
Las autoridades sanitarias españolas aprobaron este viernes el plan que amplía las terapias avanzadas a las que tendrán derecho los enfermos españoles que las necesiten y que establece los mecanismos y organización que deben garantizar que las recibirán con iguales derechos y facilidad de acceso vivan donde vivan.
Una medida que no ha contado con el respaldo de la Consejería canaria de Sanidad por entender que va en perjuicio del acceso equitativo a estos medicamentos.
En concreto, la responsable del departamento canario, Esther Monzón, mostró su rechazo al punto del Plan de Terapias Avanzadas en el Sistema Nacional de Salud 2025-2028que establece que, «como norma general, el pago del medicamento de terapia avanzada (MTA) correrá a cargo de la comunidad autónoma derivadora cuando el tratamiento se administre fuera de su comunidad autónoma. En cualquier caso, el medicamento de terapia avanzada será abonado en su totalidad por la comunidad autónoma de origen, es decir, en la que tenga su asistencia sanitaria y, por lo tanto, su tarjeta sanitaria. En el caso en el que la indicación del tratamiento no se haya producido en la comunidad autónoma en la que reside el paciente, la comunidad de origen y de destino deben acordar la instauración del tratamiento», informó la Consejería a través de un comunicado divulgado tras la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.
Según expuso Monzón «esto rompería uno de los principios del Fondo de Cohesión Sanitaria por el cual el centro de referencia financiaba al completo el tratamiento, resarciéndose el gasto causado a través del Fondo de Cohesión, para evitar diferencias en el acceso según las posibilidades financieras de cada región».
Nuevos recursos y tratamientos
Sea como fuere, el nuevo plan actualiza y amplía el primer programa de Terapias Avanzadas aprobado por el Ministerio de Sanidad y las autonomías en 2018, centrado en la implantación de la entonces novísima terapia CAR-T -la modificación genética de células inmunológicas para que ataquen tumores- y que en estos seis años ha permitido tratar a más de 2.000 ciudadanos en todo el país, fundamentalmente pacientes con cánceres sanguíneos (linfomas, leucemias y mielomas), pero también a personas con enfermedades raras.
El documento incluye entre los medicamentos y procedimientos innovadores que se ofertarán desde la maquinaria médica e investigadora del programa las terapias génicas -las que modifican, reemplazan o inactivan genes defectuosos para prevenir o tratar patologías-, las terapias celulares -tratamientos, normalmente con células madre, modificadas genéticamente o no- las terapias tisulares, que son procedimientos para la restauración de tejidos como tendones, huesos, nervios, intestinos o válvulas cardíacas, entre otros.
La idea es abarcar los muchísimos medicamentos y procedimientos que, además del CAR-T, se han autorizado y financiado por la sanidad pública desde 2018 o que se podrían incorporar a corto y medio plazo.
Declaran prioritario el abordaje de la covid persistente
El Ministerio de Sanidad reconoce por primera vez la covid persistente como un problema de salud crónico, cuyo abordaje es prioritario dentro de la estrategia de cronicidad, junto a otros como el dolor crónico no oncológico, la enfermedad celíaca o la polio. El Plan Operativo 2025-2028 de la Estrategia para el Abordaje de la Cronicidad, aprobado ayer en la reunión del Consejo Interterritorial de Sanidad, introduce una serie de dolencias no especificadas en la estrategia de cronicidad que se puso en marcha en 2012 ante el creciente impacto sobre las personas, los servicios de salud y la sostenibilidad del sistema. La Red Española de Investigación en Covid Persistente (Reicop) aplaudió que por fin se reconozca la covid persistente como un problema crónico que requiere un abordaje prioritario, pero pidió «pasar a la acción» y que los pacientes reciban realmente la atención que necesitan.
