Acosta: «La histórica brecha» entre mujeres y hombres «ya no se puede consentir»

Además de ella misma, la ULPGC dintinguió con el maximo título académico a Teresa Anguera, Rosalía Arteaga, Ouided Bouchamaoui, Irina Bokova, María Dolores Castro, Teresa Freixes, Ameenah Gurib Fakim, Emilia de los Reyes Ruíz, Antonia Trichopoulou y Silvia Zanuy. A este elenco se deben sumar la soprano Barbara Hendricks y la científica María Blasco, que no pudieron estar presentes este martes en la ULPGC por motivos personales, y para las cuales se tiene previsto celebrar sus actos de investidura a lo largo de este año.

Acosta, que fue la encargada de hablar en nombre de todas las distinguidas, dio un discurso en el que desgranó desde su especialidad, la Historia, la discriminación secular de las mujeres y ahondó en «las causas o concausas de esta invisibilidad o, mejor, de esta ocultación u orillamiento» de las mujeres. Y afirmó que la Historia ha estado «peleada» con ellas. Y puso de relieve la importancia «de la investigación y de la universidad en la construcción del relato. Relato que tarda e impregnar la conciencia ciudadana para poner en evidencia los avances sociales y, en este caso, la desigualdad. La universidad y también las instituciones culturales están obligadas a transmitir los nuevos valores y, por supuesto, contextualizar los relatos para que la igualdad sea un mensaje básico y transversal».

Por su parte, el rector de la ULPGC, Lluís Serra, dijo que este acto, que se enmarca en el Día Internacional de la Mujeres, el 8 de marzo y en la celebración del 35 aniversario de la universidad pública grancanaria, dijo que había «tomado la decisión de considerar este significativo acto como una crítica cultural a esta discriminación convaleciente y como una invitación a reconsiderar el gran valor de estas mujeres académicas más allá de las ideologías de género o las tradiciones sociales que favorecen a un género sobre otros».

Serra dijo que «reconocer y honrar a once mujeres notables que han dedicado sus vidas al avance de los derechos humanos y el empoderamiento de la mujer como motor de la ciencia y de la sociedad, es algo que no solo es de justicia, sino que es la expresión del deseo de nuestro claustro de dar la relevancia que merecen estos trabajo».

El rector reconoció que la universidad «no ha sido inmune a ciertas prácticas discriminatorias basadas en el género, enraizadas en tradiciones muy arraigadas que han impedido la igualdad real y efectiva entre mujeres y hombres» y, de hecho, añadió, «persisten sesgos de genero en la evaluación y promoción del personal académico, lo que perpetúa la desigualdad que se agrava en la cúspide de la pirámide académica». Por eso, si bien la universidad «como institución emblemática de la sociedad, refleja tanto sus valores como sus transformaciones» esa «relación estrecha la convierte en un terreno fértil para la reproducción de patrones sociales», pero también, abundó, «en un motor crucial para el progreso y la equidad».

El acto, en el que estuvieron presentes los exrectores de la ULPGC Rubio Royo, Manuel Lobo Cabrera y José Regidor García, además del rector de la Universidad de La Laguna, Francisco García, así como representates políticos y milatares, llamó la atención también por la inusual composición de la mesa presidencial, con Luuis Serra como unico hombre al estar acompañado por la secretaria de la ULPGC, Inma González, la alcaldesa de Las Palmas de Gran Canaria, Carolina Darias, la viceconsejera de Políticas Sociales del Cabildo insular, Isabel Mena y la presidenta del Consejo Social de la ULPGC, Ana Suárez. Además, en el escenario estaban las once distinguidas junto a sus once madrinas.

Al finalizar la ceremonia, en la que se les hizo entrega del birrete, el guante, el anillo y un libro a las honoris causa, se fotografiaron junto a un grupo de estudiantes del IES Pérez Galdós, donde el lunes la Premio nobey y también distinguida Ouided Bouchamaoui plantó una palmera en el jardín del centro.