

Secciones
Servicios
Destacamos
Efe
Las Palmas de Gran Canaria
Lunes, 12 de febrero 2024, 13:10
La Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) y la Plataforma Oceánica de Canarias (Plocan) iniciarán esta semana una nueva campaña de estudio de series temporales en el Atlántico Este al norte de las islas con el fin de recopilar datos sobre diversas variables relacionadas con el calentamiento global en los océanos, pues la región canaria es un lugar clave para investigar los efectos del calentamiento global en los océanos.
Así lo detalla Javier Arístegui, catedrático de Ecología de la ULPGC y responsable del grupo de Oceanografía Biológica, en una rueda de prensa celebrada este lunes. Arístegui resalta la variabilidad única de Canarias, atribuyéndola a factores como el afloramiento africano y el transporte de partículas.
En la realización de este estudio se procederá a la renovación de una serie de fondeos y trampas de sedimento y correntímetro en la Estación Europea de Series Temporales Oceánicas de Canarias (ESTOC), facilitando así el análisis de la acidificación de los océanos en esta región, así como de aspectos vinculados con la biología y la química, todos ellos relevantes para comprender el calentamiento global y los niveles de oxígeno en el agua.
La actualización de estos fondeos es crucial, ya que contribuirá al sistema europeo de observación oceánica de la columna de agua y del carbono, así como a la vigilancia de elementos de biodiversidad como el plancton, según explicó Eric Delory, responsable del observatorio de Plocan.
La Estación de Series Temporales Oceánicas se encuentra a unas 60 millas náuticas (aproximadamente 100 kilómetros) al norte de Gran Canaria y ha estado en funcionamiento desde 1991. La renovación de esta infraestructura permitirá seguir avanzando en la investigación marina en la región.
Javier Arístegui explicó que las trampas de sedimento recogen los residuos orgánicos que caen desde la superficie del océano hasta el fondo, conocidos como «nieve marina». Estos sedimentos tienen la capacidad de almacenar carbono durante largos períodos si llegan a profundidades superiores a los 1.000 metros.
Además de las trampas, se instalarán cámaras en los robots submarinos de Plocan para estudiar el flujo de partículas que se hunden en el océano en dirección a la estación ESTOC. Este seguimiento permitirá obtener datos valiosos para futuras investigaciones.
El catedrático de Química Marina de la ULPGC, Melchor González Dávila, ha destacado un aumento del 13% en la acidificación de las aguas atlánticas superficiales en los últimos 25 años, lo que amenaza la vida marina y afecta a procesos ecosistémicos vitales.
Esta acidificación, causada por la absorción de dióxido de carbono, compromete la formación de carbonato cálcico, esencial para los crustáceos, y afecta la disponibilidad de nutrientes clave, como el hierro. González Dávila enfatiza la necesidad de estudiar la adaptación de los organismos y aplicar técnicas de secuestro de carbono para revertir el daño causado por el calentamiento global.
González advierte sobre la posible desaparición de especies marinas y destaca la importancia de reducir las emisiones de dióxido de carbono para mitigar estos impactos.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.