Brutal abismo de género en las orquestas españolas

De todos los ámbitos creativos y culturales, el de la música clásica es el que tiene una mayor brecha de género. Es el más machista, cabría incluso decir, y el más alejado de la paridad a la que se acercan más el rock, el cine, la literatura, el teatro, la política, la ciencia, o las Fuerzas Armadas. Así lo constata el estudio titulado '¿Dónde están las mujeres en la música sinfónica?', que constata como las orquestas españolas suspenden clamorosamente en igualdad. Tanto que únicamente el 1% de las obras que programan las orquestas sinfónicas españolas son obra de mujeres.

El estudio también refleja que solo el 5% de los conciertos están dirigidos por mujeres y que apenas el 23% de los que incluían un solista fueron interpretados por una mujer. «Se demuestra que hay sesgo de género», destaca Fátima Anllo, presidenta de Clásicas y Modernas, la asociación que realiza el estudio junto a Mujeres en la música y en colaboración con la Fundación SGAE.

Las alarmantes conclusiones de su estudio revelan que «la participación de la mujer en la música está muy lejos de lo que sería deseable en términos de paridad e igualdad». «Es obvia la injusticia para las compositoras e intérpretes y evidencian que el de la música clásica es el ámbito más excluyente en el campo de la creación», insiste Anllo.

Se han analizado los programas de abono de 23 orquestas españolas durante la temporada 2018-2019, unas formaciones que ofrecieron 643 conciertos con 1.840 obras de 305 compositores y compositoras, 154 directores y directoras, y 215 solistas. De los resultados se desprende «que el mundo de la música clásica es uno de los territorios masculinos por excelencia del sector cultural» y que «no se muestran cambios en esta tendencia». Es decir que la manifiesta y escandalosa desigualdad, lejos de reducirse, se mantiene.

Recoge el estudio que solo el 1% de las obras programadas por las orquestas españolas tiene autoría femenina, con 26 obras seleccionadas escritas por compositoras frente a 1.864 piezas firmadas por varones. Además, solo el 8% de las batutas estuvieron en manos de mujeres, con 13 directoras frente a 141 directores de orquesta contabilizados, «cuando en el resto de los campos culturales las mujeres alcanzan casi el 30%», destaca Anllo.

En la temporada analizada, estas 13 activas mujeres dirigieron apenas 32 conciertos del total de los 643 analizados (el 5%). Este dato representa apenas un punto más que en la temporada anterior, mientras que el número de directoras se ha incrementado en tres.

Solo el 23% de los conciertos con solistas fueron interpretados por una instrumentista (105 mujeres, frente a 358 hombres). Una cifra acorde con la nómina de solistas femeninas, que representan menos de un tercio del total de todos los solistas: el 28% (60 mujeres y 155 varones).

En cuanto a los instrumentos, solo en el arpa y la viola ellas son mayoría, con el 100% y el 60% de los intérpretes respectivamente, mientras que en flauta también se supera el tercio, con un 40% de mujeres, «cifra que podría considerarse igualitaria», según los responsables del estudio. Asimismo, n más de la mitad de los instrumentos, 13 de 22, la presencia femenina es nula.

De las 23 orquestas estudiadas 13 nunca han programado en la temporada analizada ni una obra compuesta por una mujer ni un concierto dirigido por una dama. Entre ellas están la OCNE (Orquesta y Coro Nacionales de España) y la OSCRTVE (Orquesta Sinfónica y Coro de RTVE) «que pagamos todos con dinero público». «Destacamos estas por el volumen de conciertos que han programado y lo insólito que resulta que no haya en toda la temporada ni una sola mujer», concluye el informe.

Apenas el 8% de las batutas están en manos de mujeres, con 13 directoras de orquesta activas frente a 141 directores.

De 23 orquestas, 13 no programaron ninguna obra de una compositora ni un concierto dirigido por una mujer.

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