La avenida condiciona las obras en las vías céntricas de Arrecife
Las faenas destinadas a peatonalizar las calles Hermanos Zerolo y Antonio Porlier y Sopranis, de próxima adjudicación, corren riesgo de no ejecutarse este año. La causa, el temor que hay en el Cabildo a que las obras generen un caos circulatorio en la ciudad.
Según apreció el consejero de Industria, Comercio y Energía, Ángel Vázquez, se entiende que la reforma de Antonio Porlier y Sopranis, de Fajardo a Plazuela y Canalejas, es la actuación que más riesgo tiene de ser aplazada, debido a que las obras, programadas para que tengan una duración de cuatro meses, obligarían a redireccionar todo el tráfico de la zona a la calle Manolo Millares (antigua José Antonio), trazado que ya soporta momentos de congestión viaria.
Como alternativa para que en 2018 salga esta propuesta, presupuestada en justo 240.782,89 euros y con nueve ofertas registradas en tiempo y forma, de inminente adjudicación; por el Cabildo se entiende que el Ayuntamiento de Arrecife debería proceder a la apertura de la avenida a todo tipo de tráfico. Según el parecer de Vázquez, al menos durante el periodo en que las obras puedan tener lugar.
Más factibles de sí tener desarrollo durante el verano son las obras destinadas a peatonalizar Hermanos Zerolo, por ser un trazado que tiene menos carga de tráfico y con menos relación con la circulación por la avenida y zonas aledañas. Este proyecto, como ya contó este diario en fechas recientes, con un presupuesto de 449.739 euros, cuanta con siete empresas interesadas en la ejecución, estando previsto que durante abril se dé a conocer la adjudicación.
La acción en Hermanos Zerolo tiene un plazo de ejecución máximo de cinco meses, para un tramo de unos 200 metros, entre Francos y Fajardo. Es decir, en caso de que esta propuesta tuviera inicio durante el verano, deberían estar listas las faenas antes de acabar el año. Y con opciones, según dio a entender el consejero, de ser entonces cuando se determine el futuro para la acción en Antonio Porlier y Sopranis.
La avenida, desde que se completó su reforma, a finales de 2016, tiene el tráfico restringido, de modo que solamente hay autorización para vehículos de residentes y para los dedicados a servicios públicos. En octubre de 2016 se aprobó en sesión plenaria abrir el trazado a todo tipo de vehículos, si bien la potestad es exclusiva de la alcaldesa, Eva de Anta.