Hasta 6.000 euros por una «camarera guapa»

«Cuando vi la noticia en la prensa se generó la orden de servicio y fue la inspectora de la zona», argumentó Francisco Guindín, director territorial de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Canarias, que destaca la celeridad con que se actuó. «Cogería los nombres y les dejaría una citación. Ahora tendrán que comparecer en la Inspección de Trabajo y comprobar los hechos denunciados, que parecen bastante evidentes», detalló Guindín, que calcula que el restaurante tendrá que pagar una sanción mínima de 6.000 euros si finalmente la inspectora considera que la presunta vulneración de derechos de los trabajadores que cometió el restaurante al pedir una camarera con requisitos discriminatorios se considera infracción «muy grave», y un mínimo de 3.000 euros si solo es «grave».

Será el Gobierno de Canarias quien determine el acta de infracción que elaborará la inspectora tras revisar toda la documentación del restaurante, «porque en discriminaciones en materia laboral nosotros proponemos la sanción y el Gobierno de Canarias es quien modifica o anula en vía administrativa», enumeró el director territorial, que calcula que un procedimiento de este tipo puede durar tres meses prorrogable a otros tres.

El restaurante afectado, el Clipper La Puntilla, podrá recurrir en vía administrativa y judicial. El motivo de la citación es la «discriminación en el acceso al por razón de sexo» y por ser una oferta laboral que «atenta contra la dignidad».