Denuncian a las masajistas de las playas del Sur

Gabriel Suárez / Maspalomas

Es una actividad de la que ya han realizado serias advertencias los profesionales del Colegio de Fisioterapeutas de Las Palmas por los riegos que conlleva para la salud de las personas. Los masajes en las playas del Sur por parte de mujeres, en su mayoría de origen asiático, vuelve a la palestra con la denuncia interpuesta ante el Juzgado de Guardia por un vecino del municipio de San Bartolomé de Tirajana, que asegura estar avergonzado por la permisividad de las autoridades con este «fraude».

El denunciante, Nicolás Suárez, carga sus tintas no solo contra las personas que realizan esta actividad en las playas, sino contra el jefe de la Policía Local y los concejales de Playa y de Seguridad, a quienes hace responsables de que no se actúe contra las referidas masajistas.

También ha presentado denuncias en el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, haciendo constar la actividad de las masajista, y en la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Las Palmas, en donde pone de manifiesto por escrito, que son unas veinte las personas que se están dedicando a realizar masajes en las playas de San Agustín, El Veril, Playa del Inglés, del Faro y Meloneras.

«Cada una de estas personas», estima, «gana unos 100 euros por día, unos 3.000 euros al mes, que suman unos 720.000 euros anuales», expone en su denuncia, proponiendo se investigue si están dadas de alta en el régimen de la Seguridad Social y si cumplen con las exigencias de la Agencia Tributaria, como lo tiene que hacer cual otro trabajador.

Licencia. También añade que las masajistas al parecer no cuenta con ninguna licencia municipal o autorización que les habilite para ejercer la actividad en las playas del municipio.

Asimismo exige se verifique si tienen titulación o algún tipo de formación que les permita llevar a cabo este trabajo, un asunto del que en su momento se ocuparon de poner de relieve los profesionales del sector, quienes aseguraron que estas personas sin formación podrían estar poniendo en riesgo la salud de las personas con la práctica de unas maniobras que solo pueden hacer los profesionales.