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Lourdes Gómez
Corresponsal. Londres
Lunes, 5 de junio 2023, 20:05
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El duque de Sussex se ausentó este lunes de la sesión inaugural en su reclamación particular de perjuicios derivados de la injerencia de los tabloides del grupo Mirror en su vida privada con técnicas criminales. Pero su representante legal, David Sherborne, acusó a la prensa popular de «sembrar discordia» entre los príncipes Enrique y Guillermo y de provocar en el menor de los hermanos «enormes ataques de depresión y de paranoia», entre otros daños destacados en la exposición de su alegato en el Tribunal Superior Justicia de Inglaterra y Gales.
El letrado entresacó un artículo de The People, de 2003, que describe una supuesta disputa entre los príncipes acerca de Paul Burrell, el mayordomo de su madre, lady Diana. Enrique tenía 18 años, se había embarcado en un año sabático y la bronca fraternal amenazaba con enturbiar el ambiente de las navidades familiares, de acuerdo con la publicación. «Las semillas de la discordia entre los dos hermanos comenzaron a sembrarse incluso en una fase formativa tan temprana», sostuvo el curtido abogado de víctimas de interferencia de comunicaciones y otros métodos ilícitos de obtener información personal y confidencial.
Sherborne añadió que la «confianza comienza a erosionarse» cuando los desacuerdos entre hermanos y sus «sentimientos internos» se airean y se desvelan al público en «exclusivas» de medios sensacionalistas. «Uno puede ver como la desconfianza puede brotar desde una edad temprana debido, precisamente, a este tipo de actividad», alegó sin entrar en detalles sobre el aparente abismo que ahora separa a los hijos de Carlos III.
Se espera que Enrique preste testimonio este martes, tras enojar al juez Timothy Fancourt ignorando su petición de personarse el lunes en el juzgado civil de Londres donde se dirime la causa. Tendrá la oportunidad de explicar el «innecesario estrés y tensión» que el constante acoso de la prensa causó en todas sus relaciones. En un avance de su declaración jurada, denuncia que en cuanto entablaba una amistad o «se rumoreaba» que tenía novia, la familia completa del nuevo ligue era «arrastrada al caos».
La querella del príncipe abarca un abanico temporal desde 1996 a 2010 e incluye informaciones publicadas en los tres periódicos del Mirror sobre episodios oscuros en su trayectoria vital, que pueden centrar el interrogatorio de la defensa. MGN niega todas las alegaciones de 'hackeo' de su móvil y reconoce únicamente que existen pruebas de que pagó a un detective privado por un encargo que se ejecutó con métodos ilegales. El testimonio del duque debería prolongarse hasta el miércoles.
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