CC y NC reclaman a Sánchez un trato singular en el reparto de las ayudas

Un trato diferenciado ajustado al alcance de la crisis. Las dos fuerzas nacionalistas canarias con presencia en el Congreso, CC y NC, reclamaron ayer al presidente Sánchez que tenga en cuenta la condición de región ultraperiférica (RUP) y el especial impacto de la covid-19 en la economía de las islas a la hora de repartir las ayudas europeas, igual que España obtuvo más recursos del fondo de reconstrucción por ser uno de los países más golpeados por la pandemia.

«Usted justificó ante Europa que España necesitaba más ayudas porque era la más afectada», expuso la portavoz de CC, Ana Oramas, en su intervención, «y si aplica ese mismo criterio dentro de España, Canarias es la que tiene más dificultades y peores datos económicos», añadió.

La diputada nacionalista calificó de «bueno contra toda previsión» el acuerdo alcanzado por los socios comunitarios que ha permitido cerrar el fondo de reconstrucción, del que España recibirá 140.000 millones de euros -72.000 a fondo perdido y el resto en créditos- y el marco financiero plurianual para el periodo 2021-27, en el que las RUP salen reforzadas.

«Nos jugábamos la supervivencia del proyecto europeo, que España pudiera tener ayudas para salir de una crisis terrible y que Canarias tuviera herramientas y, sobre todo, que se compensara la insularidad», expuso. Oramas destacó especialmente que la UE haya reconocido la singularidad del archipiélago por su condición de RUP hasta en cuatro artículos, lo que entiende que obliga al Gobierno español a hacer lo mismo cuando aborde el reparto de los recursos.

«Europa reconoce que hay que compensar la lejanía y la insularidad, algo que su partido y Podemos se negaron a hacer en la comisión del Congreso para la reconstrucción, que ignoró los derechos de los canarios», reprochó la portavoz de CC al presidente. Entre los asuntos pendientes, enumeró la necesidad de despejar cómo quedan las ayudas Posei, que se deben desarrollar ahora mediante reglamento, y los efectos del brexit para el sector agrario de las islas, además de aprobar cuanto antes la prórroga de los ERTE del sector turístico hasta diciembre.

Por su parte, el portavoz de NC, Pedro Quevedo, se felicitó por el cambio de rumbo de la Unión Europea, que frente a las recetas aplicadas para salir de la crisis de 2008 que «castigaron a los más débiles y premiaron a los responsables», en esta ocasión «ha abandonado la línea del austericidio» pese a las reticencias iniciales de los denominado países frugales.

Quevedo se refirió a la «batalla particular» para que se reconozca la ultraperificidad de Canarias, y destacó en el presupuesto comunitario para los próximos siete años «no solo se reconocen sino que se ha fortalecido la presencia de las políticas destinadas a las RUP», un logro que calificó de «absolutamente determinante». En concreto, considera un éxito que el porcentaje de cofinanciación se haya mantenido en el 85% y el aumento de los fondos estructurales a 40 euros por persona y año.

Con todo, el diputado de NC considera que pese a tratarse de un buen acuerdo, el presente y el futuro del conjunto del país y de Canarias en particular «puede ser malísimo si no actuamos adecuadamente, algo que el Gobierno estatal no puede hacer solo», señaló.

En su respuesta a los nacionalistas canarios, Sánchez reconoció que al inicio del Consejo Europeo la situación era «inquietante» porque Canarias no aparecía como RUP, una ausencia que se logró corregir. Quiso lanzar asimismo un mensaje tranquilizador respecto al compromiso estatal con las islas: «Desde El Hierro a La Graciosa, las Islas Canarias son parte de la agenda del Gobierno de España, aseguró.