El nuevo REF refuerza el trato singular del Estado a Canarias
Lunes, 17 de septiembre 2018, 07:28
loreto gutiérrez / Madrid
La reciente aprobación en la comisión de Hacienda del Congreso sitúa al nuevo REF económico en la recta final hacia su ratificación definitiva, tras un largo y en ocasiones tortuoso proceso que se inició hace más de tres años. Una vez que culmine su trámite en el Senado, la ley que actualiza los aspectos económicos del régimen canario entrará en vigor con su publicación en el BOE, previsiblemente antes de que acabe 2018, veinticuatro años después de la última reforma.
«Vital», «determinante» y «esencial» son algunos de los calificativos con los que instituciones, fuerzas políticas y agentes sociales señalan la trascendencia del REF económico, que junto al Estatuto de Autonomía de segunda generación que también está a punto de convertirse en realidad, se dibuja como elemento clave para el futuro de Canarias.
Pero, ¿por qué es tan importante esta ley? En primer lugar, porque su contenido supone subir varios escalones en el reconocimiento de la singularidad de Canarias por parte del Estado, con la adopción de nuevas medidas para compensar el sobrecoste de la ultraperificidad -que se reconoce por primera vez en la legislación española- y la doble insularidad de la Comunidad Autónoma.
Y como le gusta señalar al consejero de Economía del Gobierno de Canarias, Pedro Ortega, porque las medidas pactadas para poner al día los incentivos del REF económico tienen además incidencia directa en el bolsillo y en las condiciones de vida de los canarios, desde la factura de la luz y del teléfono, la educación de los hijos, el coste de los billetes de avión y del transporte terrestre o del agua que beben. En definitiva, repercute de manera directa en muchos de los factores que determinan la calidad de vida de una sociedad.
El proyecto de ley que la semana pasada salió aprobado del Congreso con el respaldo de PP, PSOE, Ciudadanos, CC y NC y el único voto en contra de Podemos, modifica aspectos relativos a energía, agua, gestión de residuos, control aduanero, transporte, turismo, educación, empleo, incentivos regionales y agricultura, ámbitos en los que introduce nuevas medidas o mejora las ya existentes, para compensar las desventajas estructurales del Archipiélago. En paralelo a la mejora de los aspectos económicos, se ha aprovechado la reforma legislativa para clarificar las dudas jurídicas de algunos de los aspectos fiscales.
El largo periplo del nuevo REF económico se inició con la resolución que el Parlamento de Canarias aprobó en abril de 2015, a la que siguieron varias reuniones entre los Gobiernos autonómico y estatal en las que se fraguó el compromiso común de agilizar la tramitación. La doble convocatoria de elecciones generales que dejó en suspenso la actividad política más de un año por la falta de consenso y acuerdo para formar un nuevo Ejecutivo nacional congeló también la actualización de los aspectos económicos, pese a contar ya con un borrador muy avanzado.
Con la formación del segundo Gobierno del popular Mariano Rajoy, en octubre de 2016, se retomaron las negociaciones Canarias-Estado y tras cerrar un acuerdo sobre el contenido, el REF obtuvo luz verde del Consejo de Ministros, como anteproyecto de ley primero el 31 marzo de 2017, y ya como proyecto de ley el 23 de junio de ese mismo año, una vez escuchado el Parlamento de Canarias, de donde se remitió al Congreso para su trámite parlamentario para su aprobación definitiva.
