La AIReF reabre el debate sobre la eficacia del 75% y propone sustituirlo por una cantidad fija
subvención a residentes ·
El organismo que vela por la sostenibilidad financiera ve opciones para el cambio en la ley movilidad sostenible que tramita el Congreso
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha reabierto el debate sobre la eficacia de la bonificación del 75% sobre el precio del billete aéreo a residentes, vigente desde 2018, con su propuesta de aprovechar el proyecto de ley de movilidad sostenible que se tramita en el Congreso para sustituir el sistema actual por una ayuda fija por ruta.
El organismo que vela por la sostenibilidad de las finanzas públicas señala en su informe de evaluación de la bonificación al transporte aéreo de residentes en territorios no peninsulares, actualizado en diciembre de 2022, que el proyecto de ley de movilidad sostenible recoge instrumentos para «la mejora de la calidad del gasto estatal en subvenciones» y da por hecho que durante su tramitación «se contemplará la oportunidad de introducir prescripciones específicas para este tipo especial de subvenciones».
Tras analizar los efectos del aumento de la bonificación al 75%, la AIReF concluyó que desde su entrada en vigor se ha producido un notable incremento del gasto público (un 125%), que se ha producido un aumento de precios del 12% en los billetes para los trayectos entre Canarias y la península, y que una parte muy importante de esta subida «se debe al incremento de la subvención».
Señala también que la subvención tiene una distribución «muy desequilibrada» entre la población, porque la mitad de los residentes no vuela y por tanto no percibe ayuda alguna. Por el contrario, aquellos que más vuelan reciben porcentajes altos de la subvención y el informe pone como ejemplo que en 2018 el 1 % de residentes en Canarias que más voló acumuló un 19% de la subvención.
A partir de su estudio, la AIReF identifica dos claras tendencias: las rentas altas vuelan más veces y compran billetes más caros. La consecuencia es que «son los individuos de rentas más altas los que están recibiendo una mayor parte de la subvención».
Para contribuir a un mejor diseño de la política de subvenciones, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal propone cambiar el sistema actual por una ayuda fija por ruta, porque entiende que «esta opción es mucho mejor desde el punto de vista socioeconómico y tiene un reparto más igualitario que el existente», según se desprende del resultado de las simulaciones realizadas comparando el sistema actual frente al propuesto.
El informe añade que el sistema de subvención fija también es «más ventajoso desde el punto de vista de la competencia», dado que cuando las aerolíneas tienen poder de mercado, aplicar una ayuda basada en un porcentaje de descuento sobre el precio, como ocurre actualmente, hace que estas empresas «incrementen sus precios consiguiendo un mayor beneficio y, en consecuencia, un incremento del gasto público».
La propuesta de sustituir el actual descuento de residente basado en la bonificación de un porcentaje sobre el precio del billete por una subvención fija no es nueva. Hace diez años, el departamento que dirigía la entonces ministra de Fomento del Gobierno de Rajoy, Ana Pastor, ya incluyó una disposición adicional en el anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2013 que permitía establecer una tarifa máxima bonificable para reducir el gasto que suponía la subvención, por entonces dotada de una partida de 280 millones de euros -en 2023 la dotación supera los 400 millones-, pero el rechazo del Gobierno canario y de las fuerzas parlamentarias forzó al Ejecutivo estatal a dar marcha atrás.
