Hook
Crítica TV ·
El tiempo cambia la forma en que vemos las cosas y el viaje de Robin Williams es otro cuando tienes tus propios hijos y entiendes, de verdad, lo que significa volar por ellos
Ala mañana siguiente, el desayuno era una locura de chocolates y batidos de todos los colores. Los niños nos miraban extrañados porque, a priori, en ... la mesa no había nada. Nosotros, padres adultos, les sonreíamos convencidos de que no tardarían en pillar el truco. Pero, por si las moscas, decidimos coger un poco de masa invisible y lanzársela como si fuera una bola de nieve. La comida explotó en su cara y tuvieron que limpiarse con las manos. Tras restregarse los ojos, vieron por fin la mesa que les habíamos preparado con tanta imaginación. «¡Bangarang!».
Yo creía que me sabía 'Hook' de memoria. De niño vi tantas veces la película de Spielberg (en Beta y en VHS) que el recuerdo era nítido y las escenas se sucedían una detrás de otra en mi cabeza sin esfuerzo alguno. La otra noche, en mitad de las vacaciones, decidimos ver una peli en familia. Los niños querían la versión en imagen real de 'Una casa de locos' (horrible), pero les convencimos para ver 'Hook', la historia de cómo Peter Pan regresa a Nunca Jamás.
Creo que mi mujer y yo lloramos más que los niños. Es cierto, el tiempo cambia la forma en que vemos las cosas y el viaje de Robin Williams es otro cuando tienes tus propios hijos y entiendes, de verdad, lo que significa volar por ellos. Hay partes que ni siquiera recordaba: el alcohol, la idea de los cuernos con Campanilla, los discursos del Capitán Garfio sobre la falsedad de los padres... En fin, me encantó reencontrarme con 'Hook' en Netflix, una película preciosa. Y me encantó aun más que le encantara a mis niños.
Y qué extraño lo de Robin Williams. Verle fue como cuando abres un viejo álbum de fotos y te encuentras con un familiar perdido. ¿Por qué echo tanto de menos a un tipo que nunca conocí?
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