Pacto en Madrid
Martínez Almeida gana puntos con ese acuerdo como cara amable del PP
FRANCISCO SUÁREZ ÁLAMO
Miércoles, 29 de diciembre 2021, 01:00
A la chita callando, el alcalde Madrid, José Luis Martínez Almeida, ha sacado adelante los presupuestos municipales. Lo ha hecho con los votos de su formación política, el Partido Popular, los de Ciudadanos y los ediles que eran afines a Manuela Carmena y que rompieron amarras con sus otros compañeros de izquierdas.
Se trata de un acuerdo que, evidentemente, confirma la cintura del alcalde madrileño y que el hombre navega con rumbo propio. Por un lado, mantiene la alianza con Ciudadanos, cuando en Castilla y León el Partido Popular ha precipitado el fin de la legislatura, disolviendo la cámara y convocando elecciones, porque entendía que Cs no era de fiar. Y, de paso, evita salir en la foto con Vox como aliado, cuando eso precisamente es lo que ha hecho en la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso para sacar adelante sus presupuestos autonómicos. Viendo lo ocurrido, se entiende bastante mejor que tras la batalla entre Díaz Ayuso y Génova por el control del PP madrileño hay una cuestión ideológica de calado y no sólo un choque de egos.
Lo ocurrido en Madrid es en todo caso una demostración de que el consenso es posible, por muy distantes que sean los principios políticos que defiende cada uno. A fin de cuentas, de eso va la democracia: si los electores no quieren que haya una mayoría absoluta, pues resulta obligado buscar acuerdos. Se entiende que primero con los más cercanos en los postulados ideológicos, pero nada impide abrir el abanico del diálogo. Vuelvo en esto a lo de la democracia: todo aquel que sale elegido; está legitimado para ser tenido en cuenta. Y eso va de extremo a extremo, de Vox a Bildu y de Navarra Suma a Teruel Existe.
Episodios como el de Madrid contribuyen a consolidar la cultura de pactos en un país donde no andamos sobrados de esa tradición. O para ser más exactos, en un Madrid donde están en el primer capítulo de ese libro de la gestión política. En Canarias es todo lo contrario: 40 años de Parlamento y ni una mayoría absoluta dan para aprender mucho, e incluso para impartir un máster al respecto.
Además, Martínez Almeida gana puntos con ese acuerdo como cara amable de un PP que, de paso, divide y desconcierta a la izquierda. El alcalde madrileño va así labrando una imagen de consenso que se agradece cuando por delante hay retos mayúsculos como combatir la pandemia y afianzar una recuperación económica todavía muy endeble.