Estas líneas las escribo a raíz de la infinidad de llamadas y mensajes que he recibido a raíz de un artículo publicado en esta columna recientemente bajo el título: «Mirando hacia otro lado», en el que denuncié en la apertura del curso escolar el descalabro en el que se encuentran las instalaciones deportivas en la mayoría de centros educativos y formativos de las islas. El deporte, acentuado de manera excepcional en Gran Canaria, se mueve bajo unos parámetros peligrosos, en los que los políticos de turno se vuelven locos por la foto con los llamados clubes de élite, en modalidades con nulo seguimiento, con cifras en subvenciones que alarman a más de uno. Pero la realidad del deporte de base es otra bien distinta, ya que muchísimos clubes subsisten por el amor al arte.
Pero vamos a hacer hincapié en lo que a más de uno le ha removido el estómago, el estado de las instalaciones deportivas de los centros educativos. En los institutos de Tomás Morales de la capital grancanaria, como ya anuncié, hay una piscina de 25 metros, un frontón, un pabellón y más infraestructuras en el más puro abandono. Cambian los políticos, hay nuevos habitantes en la poltrona, pero nadie hace nada. Solo sonrisas y fotos.
Ahora con una viceconsejería y dos direcciones generales dedicadas al deporte podrían analizar esta circunstancia. El ejemplo de los institutos de Tomás Morales lo pueden ver desde la ventana del despacho de la Dirección General, no hace falta que acudan a la instalación. Pero es que en los colegios de Canarias, encontramos escenas dantescas en sus canchas deportivas, con un material antiguo y demostrando cuál es verdaderamente el interés que hay por el deporte.
Cuando llega un título, en el deporte profesional, acuden con velocidad a la foto e incluso a la presentación de algún que otro partido. Increíble. Pero en ese repaso al panorama de instalaciones deportivas de los centros educativos y formativos de Canarias, qué me dicen del pabellón del Felo Monzón. Una instalación modélica que ahora está cerrada. ¿Han indicado el motivo? ¿Qué proyecto hay para que se vuelva a utilizar? Lo que importan son las presentaciones de eventos deportivos privados, la celebración de congresos o conferencias, la mejor de las sonrisas para la correspondiente foto, el sitio en el palco y a vivir que son dos días.
El deporte merece una reflexión profunda. Si uno ve las instalaciones deportivas de los colegios e institutos se da cuenta que les importa un carajo.
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