La conciliación, según Clavijo
«El Gobierno de Canarias no creará más plazas públicas para niños de 0 a 3 años pese a que el ratio en las islas es de un plaza por 10 en el País Vasco. Avanzar en la igualdad no es cosa de este gobierno».
El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, parece haber olvidado que hace apenas un mes se celebró el Día de la Mujer y que miles de féminas salieron a la calles del país para reivindicar una igualdad de género real y efectiva y medidas que permitan conciliar la vida laboral y familiar. Una movilización que fue portada de medios nacionales e internacionales.
Saco esto a colación porque precisamente una de las razones por las que las mujeres perciben menos salarios (y menos paga en su jubilación) y tienen menos opciones laborales dentro de sus empresas es por los hijos y la imposibilidad de compatibilizar una cosa con la otra.
Más igualdad pasa por más plazas públicas en guarderías y más servicios donde no cueste un ojo de la cara dejar a los pequeños mientras sus padres trabajan. Mientras esta red no exista uno de los dos progenitores debe sacrificarse y, por las razones que sean (culturales, sociales, económicas, salariales...), suele tocarle a la mujer.
Frente a esta realidad Clavijo ha decidido mirar para otro lado. Esta semana y a raíz de una pregunta formulada por la portavoz de Podemos, Noemí Santana, el presidente del Gobierno ha rechazado crear más plazas públicas para niños de 0 a 3 años porque, según él, «lo conveniente es que lo financie el Estado».
En las islas por cada niño escolarizado de 0 a 3 años hay diez en el País Vasco y seis en Castilla y León. En Canarias solo un 25% de los niños de esa edad tienen derecho a plaza pública pero a Clavijo esto no le importa. Solo mira a otras regiones cuando la comparativa beneficia a Canarias, cuando es perjudicial no conoce los datos.
La propia antigüedad de la ley que regula las escuelas infantiles demuestra la desidia del Gobierno canario con este tema. Se aprobó hace casi 20 años y sigue vigente pese a los cambios sociales que ha habido en este tiempo. No hay rastro de conciliación en ella pero eso al Gobierno no le preocupa. Eso sí, baja el precio de compresas y tampones. Todo por la igualdad.