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Carlos Baute y su mujer, la arquitecta venezolana Astrid Klisans, entraban en su casa con el coche cuando ocurrió un hecho «espantoso». No se percataron de que uno de sus perros, Haru, se encontraba entre las llantas del coche y terminaron por atropellarla. «Solo recuerdo gritos, una angustia, terrible», narra la joven en su cuenta de instagram.
«Fue horrible, espantoso, de hecho hay partes que ni si quiera recuerdo, supongo de lo traumático que fue« lamenta la arquitecta. Todavía mantiene ese sobresalto en el cuerpo ya que la perra sobrevivió al incidente y se está recuperando, de acuerdo con las imágenes que comparte Klisans en redes sociales, en las que se observa su evolución.
La pareja relata que llevaron al animal al veterinario «con muy poco oxígeno» pero que consiguió resistir y «tienen esperanza» en su recuperación. «Hoy sigue con nosotros y está mejor. Seguiremos rezando por ella y porque pase una buena noche y mañana esté todavía mejor», añade la arquitecta en una de sus últimas publicaciones.
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