Verdes y liberales anuncian el sondeo de un gobierno de coalición con los socialdemócratas

La iniciativa para los sondeos a tres partió de los ecologistas. Su copresidente Robert Habeck destacó que los sondeos por separado en días pasados habían demostrado que una alianza con el SPD y el FDP ofrece las mayores «intersecciones de contenidos e intereses», sobre todo en lo que se refiere a la política social. Advirtió, sin embargo, de que está completamente abierto el resultado de los sondeos con esas dos formaciones para estudiar la creación de una «Ampelkoalition», la coalición semáforo, bautizada así por los colores de cada partido, el rojo del SPD, el amarillo del FDP y el verde de los ecologistas. En ese sentido señaló que Los Verdes no descartan definitivamente, si fracasan esos contactos, la posibilidad de llegar a un acuerdo con los conservadores para negociar una «Jamaika Koalition», la alianza que lleva los colores de la bandera del país caribeño, en la que el negro pertenece a CDU/CSU. Habeck subrayó que en la conservaciones mantenidas este martes con los partidos de la Unión estos se esforzaron sumamente y buscaron el acercamiento a Los Verdes. Las diferencias en algunos contenidos fueron, sin embargo, notorias, reconoció el líder ecologista.

«Hemos aceptado la propuesta de unas conversaciones con el SPD», manifestó poco después el presidente de los liberales, Christian Lindner, tras conocer la invitación verde, para dejar claro igualmente que no descarta para nada la opción jamaicana. Lindner confirmó que los primeros contactos entre las tres formaciones tendrán lugar este mismo jueves y que no habrá diálogo en paralelo con los conservadores. Añadió que su partido apuesta por un gobierno de centro que refuerce los valores liberales y suponga un verdadero impulso para la «renovación» del país. Tras los comicios del pasado 26 de septiembre, verdes y liberales sondearon por separado las posibilidades de unirse juntos al futuro ejecutivo alemán. Posteriormente se reunieron, también por separado, con SPD y CDU/CSU. La decisión de los dos partidos menores de no descartar definitivamente la opción de la «Jamaika Koalition» es considerada por los observadores políticos como una maniobra de presión ante el SPD a la hora de sondear una posible alianza, con el fin de sacar los mayores réditos posibles en las posteriores negociaciones.

Annalena Baerbock, copresidenta de Los Verdes, subrayó al lanzar la invitación a liberales y socialdemócratas que Alemania afronta grandes retos que deben ser resueltos cuanto antes. Por eso, dijo, los ecologistas piensan que «este país no puede permitirse un largo tiempo de incertidumbre». Habeck explicó a su vez que en los sondeos con SPD y FDP se deben aclarar y discutir las cuestiones que dividen ideológicamente a las tres formaciones para poder entrar con posibilidades de éxito posteriormente en unas negociaciones de coalición. «Nos encontramos en un proceso muy dinámico», afirmó el líder ecologista, para el que es necesario trabajar en un ambiente de confianza. Verdes y liberales advirtieron de que los sondeos con el SPD se llevarán a cabo con la más absoluta reserva y sin dar a conocer sus contenidos. Ambos partidos expresaron su irritación por las filtraciones a la prensa que se habían producido tras sus contactos por separado con los conservadores. «Confianza significa naturalmente también que luego no aparezca todo en los periódicos», comentó Habeck.

La crisis interna y de liderazgo en CDU/CSU y las indiscreciones por parte de alguna fuente conservadora sin identificar parece ser la causa por la que ecologistas y el FDP han decidido suspender sus sondeos con la Unión. Desde el fracaso electoral se ha abierto un lucha por el poder entre los conservadores, muchos de ellos decididos a derribar al presidente de la CDU y candidato a la Cancillería Federal, Armin Laschet, a quien culpan del desastre en las urnas. Mientras Laschet no pierde la esperanza de suceder a Angela Merkel al frente del gobierno alemán si fracasan los contactos entre SPD, FDP y Los Verdes, Markus Söder, presidente de la CSU y primer ministro de Baviera, dio por muerta esa posibilidad. El anuncio de ecologistas y liberales significa «de facto un rechazo a Jamaica» y el fin de las aspiraciones conservadoras. «El día de hoy es una decisión previa que hay que aceptar» con «autoestima y dignidad», dijo Söder desde Múnich, donde al ser preguntado por la crisis conservadora y el futuro de Laschet se desentendió del asunto y dijo secamente que «las cuestiones que afectan a la CDU, debe discutirlas la CDU».