El Kremlin advierte de que el ataque masivo ejecutado por Ucrania puede entorpecer el proceso de paz

Las autoridades rusas, además de un gran ataque con drones, han denunciado bombardeos contra Kursk y otras regiones de Rusia. Estas incursiones se han producido de madrugada, pocas horas antes de que en Arabia Saudí comiencen las conversaciones entre Ucrania y Estados Unidos para establecer las condiciones de cara a un plan de paz. Semanas atrás ya se reunieron dos veces representantes de Washington y Moscú.

«Kiev trata de frustrar la creciente tendencia hacia un acuerdo de paz atacando con vehículos aéreos no tripulados», ha subrayado el portavoz del Kremlin, quien ha llamado la atención sobre el hecho de que «el régimen de Kiev está atacando edificios residenciales». Peskov ha dicho que se tomaron a tiempo las acciones defensivas necesarias, «lo que permitió proteger Moscú y muchas otras regiones».

El alcalde moscovita, Serguéi Sobianin, sostiene que ha sido la capital rusa la más afectada por este bombardeo «masivo» de aparatos aéreos no tripulados. Según sus informaciones, la incursión tuvo lugar entre las 4.30 y 7.00 (hora local) del martes y muchos drones pudieron ser derribados, pero, según él, la caída de fragmentos causaron un muerto, varios heridos y cuantiosos daños materiales en edificios de viviendas e infraestructuras. En un aparcamiento ardieron completamente 20 vehículos.

Por su parte, el gobernador de la región de Moscú, Andréi Vorobiov, declaró a la prensa que varias personas resultaron heridas en las localidades cercanas a la capital de Vídnoye, en donde se contabilizó un muerto, y Domodiédovo, con otro fallecido más. «Además, los restos de un dron cayeron sobre un edificio de viviendas en Rámenskoye, donde al menos siete apartamentos de los pisos 19 al 22 de un edificio en Sévernoye Shosse resultaron seriamente dañados», añadió.

Asimismo, los servicios de emergencias recibieron llamadas que alertaban sobre impactos de drones o la caída de fragmentos en los pueblos próximos a Moscú de Kolomna, Zaraisk, Serébrianie Prudí, Sérpujov, Rámenskoye, Voskresensk, Lujovitsi, Bronnitsi, Domodíedovo, Léninskoye, Podolsk, Elektrostal y Kotélniki. Según el canal de Telegram Shot, en los pueblos de Saprónovo y Misaílovo, sendos complejos residenciales vieron devastadas sus fachadas y terrazas y un tejado se incendió.

En total, según el Ministerio de Defensa, este martes por la mañana fueron interceptados 337 drones sobre territorio ruso: 91 fueron destruidos sobre la región de Moscú, 126 sobre la de Kursk, 38 en Briansk, 25 en Bélgorod y 22 sobre Riazán. También fueron derribados varios drones más sobre las provincias de Kaluga, Lípetsk, Oriol, Vorónezh y Nizhni Nóvgorod.

El emisario especial del Ministerio de Exteriores, Rodión Miroshnik, ha asegurado en declaraciones a la agencia TASS que el ataque ucraniano ha causado 10 muertos, incluido un niño, y un centenar de heridos. Según su opinión, Kiev ha ordenado el bombardeo «como forma de mostrar su descontento con el diálogo comenzado entre Estados Unidos y Rusia». El Comité de Instrucción ruso ha abierto una causa penal por «terrorismo».

Se da la circunstancia de que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, antes de la reunión en Arabia Saudí, propuso poner fin a los ataques aéreos y las operaciones navales como primer paso hacia un alto el fuego (sin el cese de los combates en tierra). Kiev pide también la puesta en libertad de todos los prisioneros de ambos bandos.