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Joe Biden, este sábado durante un ac to para presentar a sus colaboradores. Reuters
Biden quiere más protagonismo federal contra el coronavirus

Biden quiere más protagonismo federal contra el coronavirus

Su Gobierno pondrá en marcha un plan general de refuerzo de los hospitales y desplegará unidades móviles

Miguel Pérez

Sábado, 16 de enero 2021, 20:37

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Joe Biden aumentará el protagonismo federal en la lucha contra el coronavirus. Aunque cada Estado tiene sus competencias, el presidente electo de EE UU pretende centralizar la estrategia con una serie de iniciativas comunes; entre ellas, reforzar los hospitales y a su personal, crear clínicas móviles e incluso solicitar la participación de la Guardia Nacional en la campaña de vacunación que hasta ahora «es un fracaso».

Una gestión poco radical, la falta de recursos sanitarios y la desigual respuesta de los gobernadores a la pandemia –especialmente los republicanos, que han minimizado su importancia– hacen que el país más castigado por el Covid-19 no haya alcanzado la velocidad de crucero en las labores de inmunización. Con 328 millones de ciudadanos, ha recibido 30 millones de dosis y solo 11 han sido ya inoculadas.

El presidente electo continúa con su intención de cambiar la conversación política. Para el veterano demócrata, que será investido el próximo miércoles, es hora de dejar en un plano secundario el 'impeachment' contra Trump y centrarse en los problemas inmediatos del país. La economía, sobre la que presentó el jueves su plan de relanzamiento y rescate, y la pandemia, de la que habló en la noche del viernes (madrugada de ayer en España) con un mensaje: hay que esforzarse en la vacunación, ya que Estados Unidos se acerca rápidamente al «sombrío hito» de los 400.000 fallecidos por el virus desde el inicio de la infección.

Un oscuro invierno

El líder demócrata asumió que EE UU permanece en «un invierno muy oscuro», con tasas de letalidad que «se incrementan» a medida que pasan las semanas. «Tenemos de 3.000 a 4.000 muertes al día», recalcó durante una rueda de prensa en Wilmington (Delaware). Él mismo es un ejemplo de la preocupación que siente ante el virus. Apenas sale de su entorno seguro –gran parte de los planes de conformación de su nuevo gabinete se hicieron en su casa–, ya se ha vacunado –por edad, 78 años, figura entre los grupos de riesgo– y extrema las precauciones en público.

El ambicioso proyecto sanitario parte de tres fundamentos. El más importante es reducir la letalidad. Más de 388.000 personas han perdido la vida en el último año y seguramente serán más de 400.000 cuando Biden tome posesión de su cargo.

El segundo factor radica en la amenaza de la nueva cepa británica, más contagiosa y que los científicos predicen que será la predominante en Estados Unidos en marzo. En tercer lugar, Biden anunció una inversión de 50.000 millones en test antivirus y una segunda partida para su plan federal e inmunizar a cien millones de personas en los primeros cien días de mandato.

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