Viejas cuitas de Aito con Maljkovich al fondo
El 26 de marzo de 1987, el Barcelona levantaba su primera Copa Korack en Limoges. Al frente de la rotación blaugrana estaba Aíto García Reneses, que iniciaba casi una década de encuentros constantes con la escuadra francesa en épicas noches europeas.
El cuadro galo fue colándose a finales de la década de 1980 y los primeros años de la de 1990 en el camino de Joventut o Real Madrid, pero fue probablemente contra el Barcelona de Aíto García Reneses cuando el voltaje estuvo más marcado.
La calidad técnica de ambos equipos se electrificó por la presencia de dos macho alfa en el banquillo: por un lado Aíto, en el otro Bozidar Maljkovic.
Después de años de rivalidad, en el Barcelona los juntó a ambos en el club. Reneses ascendía a los despachos como tutor general del club, y el balcánico fue designado como entrenador del conjunto azulgrana. Aquella relación no fue productiva y duró 16 meses. Tras el despido del serbio se abrió una catarata de reproches y descalificaciones en público.
Se volvieron a encontrar una noche europea en octubre de 1993 en Limoges. Ese día Aíto se apuntó un nuevo triunfo.
