«Siempre será mi amor platónico»
Ibón S. Rosales
Lunes, 7 de septiembre 2015, 01:15
Guillermo Cobo no recuerda la primera vez que entró al agua a surfear. «Tengo grabado en VHS cómo mi padre me lleva en el bugui arrastrándome por la arena», comienza a relatar, «supongo que en aquella época cogí el bugui y no lo solté nunca más». Natural de La Garita, Telde, ya independizado, el bodyboarder se ríe al admitir que actualmente su objetivo principal es encontrar un trabajo: «Todos los días me meto en Infojobs y en Windguru» refiriéndose a las web de empleo y a la de condiciones meteorológicas y del mar. Enamorado eso sí de este deporte al que describe como «mi amor platónico. No puedes vivir de ello tan fácil», explica Cobo con decepción, pero realista.
Empezó a competir en el año 2000 y sus mejores experiencias las vivió sin duda en los campeonatos del mundo, «fue increíble, sobre todo conocer otras culturas. Competir contra esos ídolos que llevaba viendo tantos años en vídeos, enfrentarte a ellos en el agua fue impresionante», relata. Pero los campeonatos por el mundo también le han hecho madurar como persona: «Viajar te abre mucho la mente y te cambia. Más que una experiencia sobre el surf fue una experiencia de vida», habla sobre la época en la que estuvo haciendo el circuito mundial de bodyboard por Chile y México.
Sus proyectos actuales son encontrar un trabajo y en un futuro próximo: «Formar una familia con mi novia y despegarme un poco del surfing. Ya no le daría tanto tiempo como le doy ahora», Guillermo explica que lo ha dado todo «por este deporte y no hay recompensa», refiriéndose a la dedicación no solo personal sino profesional, que no es nada fácil. Actualmente se entrena en boxeo para ganar resistencia y forma física para enfrentarse al tow-in. Una modalidad de surfing en la que hay que agarrarse a un cable atado a una moto de agua que le coloca en el pico de la ola. Todo un reto que está deseando experimentar.