Noozhoh Canarias, el caballo que se sabe campeón
Lunes, 19 de agosto 2013, 08:31
Es un campeón, tiene capacidad y él lo sabe», afirma el grancanario Enrique León (Telde, 1981). León es el preparador de Noozhoh Canarias, el caballo de la cuadra grancanaria Grupo Bolaños que ha revolucionado el mundo de las carreras.
La última oferta que se ha hecho por Noozhoh vino de Hong Kong. Ofrecen hasta 600.000 euros por un potro que se compró por 11.000. León resume sus cualidades: «Tiene potencia física, una capacidad muscular muy fuerte y fortaleza mental; es un campeón y él lo sabe».
Noozhoh es una estrella y no sólo en las pistas. El bombazo lo dio en Francia el 5 de agosto cuando, contra todo pronóstico, ganó los 1.200 metros del Critérium Bequet de La Teste, donde hizo saltar la banca porque tenía las apuestas en contra.
Nadie esperaba que el debutante español ganara y ganó. Sobre la marcha ofrecieron primero 300.000 e inmediatamente 600.000 euros por él a sus propietarios, los hermanos Juan Carlos y José Luis Bolaños, de Santa Lucía de Tirajana.
Desde entonces es una estrella. Los medios de comunicación se lo rifan y en los hipódromos se habla de sus hazañas. Se espera mucho de Noozhoh Canarias, porque tiene toda la vida por delante. Por eso por el momento sus propietarios no piensan en vender: «¿Quién sabe lo que vale?», se pregunta Juan Carlos Bolaños (43 años), durante una entrevista con este periódico realizada este jueves en Vecindario.
La historia de amor de los Bolaños con los caballos viene de lejos. Empezó con animales de paseo en su finca de Santa Lucía de Tirajana los fines de semana. «Hasta que nuestro amigo Felipe Ramírez nos animó a mí y a mi hermano a comprar un caballo de carreras».
Los Bolaños empezaron con las carreras en 2005. «Compramos la yegua Noozhah Canarias , nuestro primer caballo de carreras. Ganó seis carreras consecutivas en Gran Canaria. En 2008 fuimos a la Península, allí ganó en el hipódromo de la Zarzuela y en San Sebastián».
Después vendieron a Noozhah y pasado el tiempo compraron a su primer hijo, Noozhoh. «Porque nos gustó y por una cuestión setimental», explica Juan Carlos.