La vida sigue igual para el filial sin Héctor Figueroa
El murmullo es cada vez más insistente a cuenta de la magnífica trayectoria del filial, que luce un imponente liderato en Segunda División B. Promocionado Héctor Figueroa, y exceptuando a Leo o Artiles, a los que Lobera ya ha dado carrete, resulta casi una cuestión de justicia que llegue la oportunidad para Roque, David Simón, Tyronne, Jesús o Carlos. Que se asomen para quedarse con los profesionales. Llevan llamando a la puerta toda la temporada y, en estos momentos, acreditan un tono superior al escenario en el que se desenvuelven. Alguno, además, nada tiene que envidiar al profesional que, de momento, le impide romper el cascarón.
En Las Palmas Atlético no hay casualidades y sí certezas. Víctor tiene afilados a sus muchachos, quienes no negocian un balón ni hasta con 3-0 a favor. Comportamiento maduro y pulsaciones ganadoras las de un equipo cuajado y que tramitó al Madrid C en acciones de estrategia. Una rosca de Leo y remates de Carlos y Ayoze a saques de esquina, ya en la segunda mitad, bastaron para amarrar los puntos.
Por encima del sudor colectivo y la lección ejemplar de compromiso, queda la suficiencia con la que se manejan los futbolistas en la categoría. Ayer no tuvieron su día más luminoso. Pero nunca peligró el gobierno de la situación. Con ratos buenos y otros más sufridos, las ocasiones se sucedieron en el área visitante. No había otra dirección ante el empuje imparable de las camisetas amarillas, blindadas atrás con Leo, Ayoze y Carlos, tres fieras en el cierre, y propulsadas gracias al músculo de Roque, el talento de Tyronne y los burbujeos de Sandro. El líder no cede, aumenta distancias y su pinta es estupenda. En el Anexo se está fermentando algo grande.
