La despedida que 2016 se merece
Las Palmas tiene la oportunidad de darle a su afición la última alegría del año. Lo hará si pasa de ronda en la vuelta de los dieciseisavos de final de Copa ante el Huesca. En El Alcoraz firmaron un empate (2-2) que deja todo abierto para que sea el imbatido Gran Canaria el juez que decida quien continua y que equipo se queda por el camino.
Por un momento había dejado la tarea casi resuelta, la eliminatoria prácticamente sentenciada, pero un inesperado giro lo cambió todo. Durante la ida, la Unión Deportiva se vio con un agradable 0-2. Marcador que dejaba franca la clasificación. Pero la reacción azulgrana cogió a contrapié a un equipo plagado de suplentes y el 2-2 final terminó siendo incluso más premio del merecido para los amarillos. En la última media hora, el Huesca enseñó los dientes y golpeó hasta rozar el ko insular. Los palos y Raúl salvaron entonces, pero el susto se quedó en el cuerpo. A pesar de todo, no es mal resultado con el que se volvió a la Isla. Un empate que no admite sorpresas en el Gran Canaria pero que permite que cualquier victoria o igualada a pocos goles sea suficiente para estar entre los 16 mejores. Esto supondría un logro que, sin ser prioritario, le vendría muy bien a la UD. Además del prestigio que está en juego -se mide a un equipo de inferior categoría-, la Copa proporciona dinero al club y minutos para los suplentes. Aunque lo primero es más bien insignificante por el poco montante, lo segundo se antoja clave en una plantilla larga como la que cuenta Setién. Con 25 jugadores, cada convocatoria le supone un drama y le incomoda tener a varios jugadores viviendo casi en el ostracismo. Esta competición le permite dar bola a los menos habituales, y a los propios jugadores, reivindicarse a ojos de su entrenador. Así lo hicieron Hernán, Tyronne y Asdrúbal en el Alcoraz. Fueron los más destacados ese día, aunque solamente el mediocentro fue el que sacó rédito de su oportunidad. Ausente hasta el momento, el canterano ha vuelto a entrar en las convocatorias y pudo disfrutar de minutos contra Alavés y Leganés. En este aspecto Setién tendrá un dilema hoy. Correr el riesgo y volver a dar la oportunidad al equipo B o poner toda la carne en el asador sacando a la artillería pesada para asegurar el pase. Una difícil decisión cuando delante está un equipo muy intenso y peligroso como todos los de Anquela. El técnico linarense ya sabe lo que son las gestas en este torneo. De hecho protagonizó la mayor de los últimos años con el Alcorcón cuando eliminó -y humilló- al Madrid por un global de 4-1. Pero más allá de eso, el Huesca está demostrando ser uno de los mejores equipos de Segunda División y actualmente ocupa posiciones de privilegio que dan plaza a los Playoffs. Pero nada de esto quita responsabilidad a una UD que suma cuatro duelos seguidos sin ganar, aspecto entendible cuando tres de ellos los ha disputado fuera de casa y solo ha sumado una derrota. Pero hoy no hay excusas y menos en la Isla. En la búsqueda de la clasificación, es probable que Setién alinee una mezcla de titulares y menos habituales que dé competitividad y oportunidad a partes iguales. El Huesca ya demostró de lo que es capaz y Las palmas recibirá, avisado pero confiado en su fortaleza en la Isla, a un rival que poco tiene que perder en una eliminatoria donde el favoritismo cae a la esquina amarilla. Un orgullo el de sentirse el grande del que no se disfrutaba desde hacía mucho y que esta noche se transformará en responsabilidad para cerrar de la mejor manera un inolvidable 2016.
Alineaciones probables:
Las Palmas: Raúl Lizoain; David Simón, David García, Aythami, Dani Castellano; Montoro, Hernán, Tyronne, Momo, Mateo y Asdrúbal.
Huesca: Queco Piña; Akapo; Jesús Valentín, Jair, César Soriano; Bambock, David López; Alexánder González, Samu Saiz, Camacho; y Urko Vera.
Árbitro: Mateu Lahoz (Comité Valenciano).
Estadio: Gran Canaria.
Hora: 20:00 horas.
