Fomento retrasa el cambio de la estiba y se abre a negociar
El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, decidió este jueves retrasar una semana la aprobación del Real Decreto que liberalizará el sector de la estiba y que ha levantado en armas a los portuarios porque supone el fin de sus condiciones laborales. Los estibadores tienen siete días por delante para intentar llegar a un acuerdo. El Ministerio de Fomento llevará el Real Decreto de liberalización de la estiba al consejo de ministros de la próxima semana en lugar de este viernes, como estaba previsto. De la Serna ha decidido retrasarlo siete días para hacer llegar a los agentes sectoriales -la patronal Anesco y los sindicatos, entre ellos Coordinadora, que es el mayoritario entre los estibadores- el borrador del decreto y abrir la negociación. este viernes mismo está previsto que De la Serna se siente con los estibadores para intentar llegar a un acuerdo. La negociación, sin embargo, será corta. El propio ministro advirtió este jueves que la «fecha máxima» para lograr un pacto es el 17 de febrero, día en que se aprobará en consejo de ministros. Y el margen, limitado. Las «líneas rojas» marcadas por Bruselas a las propuestas hechas por los estibadores constriñen mucho el marco. «Hacemos lo que la Comisión nos permite hacer», remarcó. «Estamos atados de pies y manos», añadió este jueves De la Serna. El ministro mostró este jueves su voluntad de negociar pero siempre con el horizonte del 17 de febrero. Recordó, según declaraciones recogidas por Europa Press en Madrid, que la premura por la que no puede dar más tiempo a la negociación es la necesidad de que España evite una sentencia de la UE por no haber cambiado el sistema legal de la estiba «que está a punto de fallarse» . Por parte de los estibadores no hubo una valoración oficial, si bien, la noticia se recibió con satisfacción. El colectivo considera el gesto de Fomento como un «pequeño triunfo». Ahora dependerá de la habilidad de Coordinadora el obtener alguna mejoría en la propuesta de decreto. este jueves Best, la terminal de Hutchinson en Barcelona, firmó la carta de apoyo a los estibadores mientras que la patronal Anesco denunció las «intolerables medidas de presión» que estaban sufriendo las empresas.
