Este año acabará la moratoria
El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, mostró este miércoles la Feria Internacional de Turismo (Fitur) su propósito de allanar el camino este año para dar carpetazo a la moratoria turística. El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, advirtió de que se opondrá a la liberalización absoluta para consumir suelo.
Rodeado de una nube de cámaras y periodistas como no se recordaba en Fitur desde hace años, el presidente canario anunció que «en los primeros días de febrero el Ejecutivo presentará el nuevo articulado de la Ley del Suelo con el objetivo de poder culminar su tramitación a lo largo de este año 2016 para desbloquear las trabas administrativas que están impidiendo en muchas ocasiones desarrollar inversiones».
A partir de ese momento, añadió Fernando Clavijo, «la propia ley dará margen de maniobra para establecer bien a través de una disposición final, o en el propio articulado, las cuestiones que afectan a la moratoria».
El jefe del Ejecutivo regional recordó que «el Tribunal Constitucional ha dictaminado que no se puede distinguir entre los hoteles de cuatro o cinco estrellas» a la hora de establecer restricciones a la creación de nuevas camas, una distinción que sí hacía la segunda moratoria de 2009.
«Pero necesitamos garantizar también que esas infraestructuras y hoteles cuya creación se va a poner a disposición de los inversores van a ir en la senda que estamos trazando como destino turístico, es decir, respetando ciertos criterios de calidad, medioambientales y de empleo», añadió refiriéndose al reglamento pendiente de desarrollar que prevé la modificación de la Ley de Renovación y Modernización Turística aprobada en 2015. «Pero estoy seguro de que llegaremos a un acuerdo con el sector hotelero para fijar esas condiciones», insistió.
Poco después de que Clavijo lanzara estos mensajes, el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, pedía mesura a la hora de abordar el espinoso asunto de la moratoria»: «Se está intentado hacer llegar a la opinión pública la necesidad de una liberalización absoluta, y me parece un error. No podemos abrir la espita al boom de la construcción desaforada que ya hizo mucho daño a Gran Canaria, a su paisaje, y también al turismo», advirtió Morales.
«Sí estamos de acuerdo en que se abra el diálogo para ir cubriendo escalonadamente las necesidades de la Isla en el suelo clasificado, pero ordenadamente y sin descuidar la rehabilitación de la oferta», concluyó Morales.
