"Es un hecho objetivo que el señor Clavijo no es de fiar"

¿Comparte la tesis de Fernando Clavijo de que la gobernabilidad está asegurada porque tiene el apoyo de 33 diputados? De ninguna forma. No tiene el apoyo de 33 diputados cuando una parte de esos 33 habla abiertamente de la posibilidad de una moción de censura. En cualquier caso, eso deberá responderlo él; nosotros respondemos por los nuestros y quedó claro que fuimos la primera fuerza política en votos en las elecciones, mientras que la del señor Clavijo es la tercera. Habla usted de la censura: ¿sigue el PSC pensando que es posible contar con el PP? Los que hablan de la censura son los del Partido Popular, lo que sí es verdad que a veces dan una de cal y otra de arena, y en el mismo debate lo hicieron. Nosotros hemos dicho que hay que establecer un diálogo en la oposición para marcar la agenda, para hablar de muchas cosas que nos unen. ¿Es viable que su partido apoye una censura que gire en torno al PP y con Antona de presidente? Lo importante de lo que se dijo en el pleno es que la mayoría reconoce que hay que abrir puertas y ventanas y que hay que hacer un cambio en esta tierra. Los nombres quedan para una segunda fase. En cualquier caso, las mociones de censura no se debaten en la prensa. ¿Se ve usted presidenta del Gobierno a medio plazo? Cuando ganamos las primarias, cuando el partido me otorgó la confianza para ser la candidata, dije que íbamos a ganar las elecciones y algunos, dentro y fuera del PSOE, pensaban que lo decía para ilusionarme y nada más. La realidad es que lo conseguimos y fuimos la primera fuerza política, y con todas las dificultades internas en aquel momento. Estoy convencida de que pronto tendremos la Presidencia del Gobierno. En todo este proceso, ¿Ferraz a qué ha jugado: a salvar el pacto con CC o a promover la censura? Ferraz nos ha ayudado al cien por cien en las posiciones del Partido Socialista Canario y hemos estado en todo momento en contacto con Ferraz. Nos ha apoyado en las decisiones que hemos tomado y estoy segura de que seguirá haciéndolo. ¿La Gestora regional ha estado con Patricia Hernández o no? Estamos todos juntos. Las decisiones sobre las líneas rojas en el Consejo de Gobierno se tomaron por unanimidad. Eran líneas que no debíamos cruzar, como mantener la centralidad de las políticas activas de empleo en la Comunidad Autónoma, no enfrentar a unos canarios con otros... Esas cosas se hablaron en la Gestora y se vieron diferentes escenarios. Quienes juegan a dividir al PSOE deben saber que el PSOE está muy unido en esto. Volvamos al 22 y 23 de diciembre de 2016. ¿Usted era de las que quería seguir a toda costa en el Gobierno y se encontró con que otros consejeros socialistas estaban deseosos de marcharse? Primera cuestión: las agresiones unen como el cemento y los consejeros socialistas estábamos muy unidos, creo incluso que más que cualquier otro grupo humano dentro del Gobierno en la historia de Canarias. Somos una piña. Segunda cuestión: sabíamos que éramos un dique de contención de algunas políticas de ATI y de Coalición Canaria. Y desde septiembre se presentaron escenarios en los que te planteas si había que seguir, pero aguantábamos porque sabíamos que éramos ese dique de contención. Si dejábamos de serlo, no tenía sentido seguir, pero está claro que fue el señor Clavijo quien nos echó. Y es lo que buscaba desde el verano. ¿Pero valía la pena romper un pacto de gobierno por el Fdcan, por 160 millones al año que difícilmente cambiarán el modelo económico canario? Es que el pacto no se rompió por el Fdcan; se rompió porque Clavijo lo ha querido. Se ha roto porque nos empujó a eso. Me hace gracia cuando me hablan de que el presupuesto es de 7.000 millones y que nosotros rompemos por 160... ¿Por qué? Primero porque, insisto, fueron ellos, y segundo, porque por 170 millones o por uno solo. Porque nosotros no vamos a ser cómplices de una ilegalidad. Imagine que usted y yo somos consejeros del Gobierno y que usted va a transferir directamente un millón de euros a alguien de su familia; pues yo no lo iba a consentir, ya fuera un millón o 7.000. Eso es lo que ha sucedido: se ha abierto un concurso, un procedimiento de libre concurrencia entre administraciones, y desde el principio se veía cuál iba a ser el resultado. Hemos visto que el señor Clavijo no solo ha mentido al PSOE: mintió en sede parlamentaria y mintió a los sindicatos. La mentira constante es su forma de hacer política y hay múltiples ejemplos. Eso no lo podemos consentir y no lo vamos a consentir. Después de lo que acaba de decir, ¿cómo interpreta que en estos días haya miembros del Gobierno y dirigentes de CC apostando por reconciliarse con el PSOE? Estoy segura de que mucha gente de CC de fuera de Tenerife no quería que esto sucediera. Y eso refleja que la decisión de la ruptura se tomó en CC de Tenerife, o la tomó el señor Clavijo, pero está claro que no la compartían muchos miembros de CC. ¿Se fía el PSOE de Fernando Clavijo para un hipotético retorno del pacto? De ninguna forma. Ya no es solo el PSOE: es que es un hecho objetivo que el señor Clavijo no es de fiar. Puedo poner ejemplos de que en sede parlamentaria dijo una cosa sobre el Fdcan y luego no lo cumplió, o de que pidió recortes de 54 millones en Sanidad y que después se vio que no hacía falta. Menciona Sanidad. ¿Conocía usted la petición de retirar la cobertura pública de los fármacos de la hepatitis C, según lo cuenta Jesús Morera? La versión de Jesús Morera es así, y no solo porque me la contó directamente con todo lujo de detalles ese mismo día. Es que, además, entre el 26 de julio de 2016, día en que se lo dijo a Morera, y el 2 de agosto hubo una reunión entre el señor Clavijo y yo y me dijo lo mismo que a Morera. Me consta que se lo dijo a dos personas más. Y yo misma lo hablé con otra persona de CC del Consejo de Gobierno, a la que le dije que eso era una locura y que el PSOE no lo iba a consentir. Y la otra persona me dijo: «No lo vamos a hacer». ¿Por qué lo cuentan ahora y no lo hicieron entonces? Yo conté la conversación en una reunión del Comité Regional del PSC y antes de firmar aquel documento para salvar el pacto le dije a Morera que, entre las consecuencias si nos íbamos del Gobierno, estaba que nadie pondría freno a medidas como la que le planteó el señor Clavijo. Y ahora lo contamos para lo mismo: para que no se haga. El Gobierno se aferra ahora a las listas de espera para argumentar que el PSOE gestionó mal: gastó más y empeoraron los resultados. Lo primero que hizo el señor Morera fue transparentar las listas de espera. Se puso freno a ese incremento sin medida de las listas de espera y recordemos que el presupuesto de 2016 arrancó con menos dinero en Sanidad del ejecutado en 2015. Eso lo sabíamos todos y se había dicho que se iban a poner los fondos necesarios. Segunda cuestión: es lamentable que se agarren ahora a las listas de espera, cuando fue el señor Clavijo el que mandó parar los planes especiales durante un mes.