Dos décadas del mítico ascenso del año 96

El preparador de la UD por aquel entonces recuerda la situación límite con la que se encontró. «El equipo llevaba tres años en Segunda B, participando en las liguillas, pero no se conseguía el ascenso. Y ya se empezó a generar un cierto pesimismo de que si no se conseguían en esa ocasión subir, la situación económica del club hubiera sido inaguantable. Yo venía de hacerlo muy bien con el Mensajero y me llamaron y era mi tercera vez, así que a la tercera lo conseguimos. La necesidad imperiosa de lograr el objetivo provoca el arraigo y la trascendencia que tiene este ascenso», relató

Pacuco recuerda con cariño el equipo que se hizo y habló maravillas del ambiente que se respiraba. «Se diseñó una buena plantilla, pero sobre todo se hizo una gra caseta, porque aquel era un gran vestuario. Esa fue la principal clave. Se mezcló a jugadores de fuera con los de aquí. Además, tuvimos suerte con las lesiones», asveró.

Asimismo, esa temporada, la 1995-96, se produjo el estreno profesional de uno de los históricos del fútbol grancanario. «Ese año debutó Valerón contra el Mensajero en la Copa y jugó luego una veintena de partidos en los que marcó 5 o 6 goles. Se cumplen 20 años de ese ascenso justo cuando se retira esta gran leyenda», subrayó.

Por último, uno de los momentos que más le impactó fue la celebración. «Llegamos aquí a las 4 de la mañana y me acuerdo que para salir la guagua del aeropuerto costó una barbaridad. Yo tengo la anécdota de que cuando me voy a subir a la guagua me encuentro a mi madre subida en el asiento del chófer y eso para mí fue muy emocionante. Hasta Las Palmas todo fue una fiesta y luego en la playa ya fue culminar una grandísima fiesta», dijo.