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Casi a todos nos pasa lo mismo cuando pensamos en qué comer al día siguiente, no sabemos, nos devanamos los sesos para no repetir lo de siempre y, de vez cuando apetece innovar y saltarse, aunque sea un saltito corto, la dieta o la rutina.
Pues esta semana, las musas hicieron su trabajo y aquí les dejo una de esas recetas que no requiere de grandes sofisticaciones ni de un tiempo excesivo que nos robe el ratito de hacer lo que más apetezca.
Esta receta da con la ecuación perfecta: ingredientes accesibles y, por qué no decirlo también asequibles, un solo caldero para no pegarnos fregando el mismo tiempo, o más, que cocinando y un resultado delicioso y muy fuera de lo común.
Tiempo de preparación
20 minutos
Tiempo de cocción
25 minutos
Tiempo total
50 minutos
Comensales
5
Calorías
Unas cuantas
Categorías
Recetas fáciles
Ingredientes
4 solomillos de pavo
100 g de tomate seco (en conserva y en aceite de oliva)
3 dientes de ajo
80 ml de vino blanco seco
100 ml de caldo de pollo
200 ml de nata para cocinar
Unas hojas frescas de albahaca
Orégano
Sal gruesa
Pimienta negra
1 cucharadita de pimentón
100 g de queso parmesano
Paso 1:
Comenzaremos salpimentando los solomillos de pavo.
Salpimentamos el pavo
C7
Paso 2: los tomates
Con la ayuda de un colador de rejilla, escurriremos el aceite donde vienen los tomates porque, ese aceite, lo aprovecharemos para dar sabor a la receta. Eso sí, siempre y cuando vengan conservados en aceite de oliva.
Escurrimos y reservamos el aceite de los tomates
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Paso 3: el aceite
En un caldero bajo con buen diámetro, calentaremos, sin que se queme, el aceite escurrido de los tomates. Si no quiere hacer uso de ese aceite, utilice dos cucharadas de aceite de oliva.
Calentamos el aceite
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Paso 4: doramos
Doraremos los solomillos durante dos minutos, por ambos lados, a temperatura media alta.
Doramos los solomillos
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Paso 5: los ajos y los tomates
Mientras se saltean, picaremos finamente los dientes de ajo y los tomates secos en tiras y reservaremos hasta el momento de emplearlos.
Cortamos los tomantes y picamos los ajos
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Paso 6: el orégano
Una vez salteados los solomillos, les daremos un toque de orégano al gusto, retiramos del caldero y reservamos.
Añadimos orégano a los solomillos
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Paso 7: salteamos
En el mismo caldero y sin añadir más aceite, saltearemos a temperatura media los ajos y los tomates que teníamos reservados.
Salteamos los tomates y los ajos
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Paso 8: el vino
Cuando el ajo empiece a tomar color, verteremos el vino y subiremos la potencia durante 2 minutos para que el alcohol se evapore.
Vertemos el vino
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Paso 9: el caldo
Pasados los 2 minutos, verteremos el caldo y mezclaremos bien hasta integrar.
Vertemos el vino
C7
Paso 10: la nata
Seguidamente, añadimos la nata.
Incorporamos la nata
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Paso 11: integramos
Mantendremos a temperatura media-baja y mezclaremos hasta que apreciemos que todo se integra.
Mezclamos
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Paso 12: los solomillos
Acto seguido, incorporaremos los solomillos de pavo, taparemos el caldero y a la misma temperatura mantendremos al calor durante 20 minutos. Pasados los primero 10 minutos podremos darles la vuelta a los solomillos.
Incorporamos los solomillos
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Paso 13: las hierbas y el pimentón
Pasados los 20 minutos, añadiremos las hojas de albahaca y el pimentón. Mezclamos e integramos.
Añadimos la albahaca y el pimentón
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Paso 14: el queso
Por último, añadiremos el queso parmesano por la superficie y dejaremos reposar durante unos 5 minutos antes de partir los solomillos.
Añadimos el queso por encima de los solomillos
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Paso 15: cortamos
Cortaremos en medallones los solomillos y los dispondremos en una fuente.
Cortamos los solomillos en medallones
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Paso final: la salsa
Regaremos los medallones generosamente con la salsa y rápidamente a la mesa que no hay tiempo que perder.
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