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Según datos de las principales plataformas, el 14 de febrero se disparan las reservas, sobre todo, en aquellos restaurantes con un ambiente único, intimista y romántico.
En Gran Canaria no es difícil trazar una ruta por esos locales, donde, además de triunfar con su cocina, su ambiente resulta ideal para compartir una velada súper especial y memorable.
La primera parada nos lleva hasta el corazón del emblemático barrio de Vegueta, sus calles empedradas y la iluminación, casi mágica al caer la noche hacen que la velada prometa incluso antes de empezar a disfrutarla. Y justamente allí, dos son los restaurantes donde celebrar un San Valentín único.
El primero de ellos, Casa Montesdeoca, donde disfrutarás de la magia y el encanto que se desprenden de sus paredes. Un lugar único en la capital, donde su cocina, basada en la más pura tradición canaria, mira hacia el futuro realzando el producto. Un San Valentín en esta casa colonial del S.XVI lo convertirá en una celebración maravillosa.
Y muy cerquita de éste, pocas cosas tan románticas como disfrutar de la comida italiana en el Restaurante La Dolce Vita. La calidez de su local, el entorno, en ese halo misterioso que desprende el barrio de Vegueta y un plato de pasta para dos, harán venerar a este romántico santo.
Vegueta es un entorno único para un San Valentín inolvidable así que no podemos terminar nuestra ruta por este emblemático barrio sin contarles que en Rêver, además de su impecable sala, podrá disfrutar de una velada para dos, mientras das un paseo por la cocina francesa de autor.
Si lo que buscas es estar cerca del mar, el lugar ideal para celebrar San Valentín es Embarcadero en el muelle deportivo. Como una sutil banda sonora de fondo, acompañarán a la velada esos sonidos de los barcos varados y esos pasos sobre el pantalán. Sin olvidarnos de la cocina, única y pluscuamperfecta de este icónico restaurante de la capital grancanaria.
Si la comida italiana siempre ha sido, casi por definición, la más romántica que existe, pocas cosas unen tanto como compartir un sushi, así que celebrar San Valentín en la acogedora sala de El Bento japonés, donde la cocina nipona es alta costura y la atención esmerada hacia cada cliente, harán que todo vaya sobre ruedas.
Y no podemos dar por concluidas nuestras recomendaciones sin que esta ruta pase y pare en Deliciosa Marta, su extraordinaria atención, su sala impecable y su increíble cocina. Sin duda, uno de los mejores restaurantes de Gran Canaria donde, cualquier velada siempre resulta más que perfecta.
Dos locales, arrebatadoramente románticos y con una gastronomía excepcional, basada en una exigente y cuidada elaboración, nos esperan para celebrar un San Valentín único, en el norte de la isla de Gran Canaria.
El primero de ellos, La Locanda El Roque, con sus vistas sobre un acantilado y los sonidos del mar acompasando la velada. Un restaurante que lo tiene todo.
El segundo, La Colonial de Fontanales, el lugar perfecto para perderse, en una sala idílica y con una cocina llena de mimo y tradición.
Si lo que preferimos es salir por el centro, nos declaramos enamorados de la sala, la propuesta y la bodega de la Enoteca El Zarcillo, sin duda, un lugar más que ideal para celebrar San Valentín. Puro despliegue de encantos.
La espectacular sala de BOHO Beach Maspalomas es un lugar más que ideal para celebrar que el amor está en el aire. Además, su propuesta gastronómica hará la velada aún más irresistible y, todo esto, mientras escuchas el romper de las olas en la orilla de Maspalomas.
Si quieres rendirte a los encantos de la comida italiana en el sur de la isla, Time es el escenario perfecto, con todos los ingredientes necesarios para que la cita sea de lo más romántica. Una pasta fresca hará de tercer elemento imprescindible en una cita para dos.
Y sin olvidar el arrebatador encanto, en sala, cocina y atención de La Guagua Blancay su tradicional y deliciosa gastronomía italiana. Un local para sorprender a quien más quieres.
Como su nombre indica, en Parque Romántico se afanarán porque tengas una velada inolvidable en esta celebración del amor. Eso sí, también se hará inolvidable la experiencia gastronómica de la que disfrutes con tu pareja.
Si continuamos nuestro paseo hasta El Salobre, parada obligada en Sidecar donde la sala, la tranquilidad y la intimidad que se quiere conseguir en una cita para dos, está más que garantizada. Si, a eso le sumamos la irresistible propuesta gastronómica que el Grupo Támbara despliega, este local se convertirá en imprescindible, el resto del año.
Y terminamos nuestro romántico paseo para celebrar San Valentín en el Valle de Mogán Restaurante, un lugar único, con unas vistas tan deliciosas como la cocina de Chema Marrero, donde la velada será idílica y maravillosa.
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