La inflación costará este año 2.300 euros a las familias canarias

Según los datos que maneja el sindicato CC OO Canarias, la inflación acumulada hasta la fecha supondrá un encarecimiento de 2.343,2 euros este año a las familias canarias. El gabinete técnico ha extraído estos datos después de comprobar que los hogares canarios destinan el 65% de sus gasto total a vivienda, transporte y alimentos y bebidas no alcohólicas, que son precisamente los tres grupos más inflacionistas en las islas con alzas del 22,3%, 11,4% y 6,1%, respectivamente, según la Encuesta de Presupuestos Familiares del Instituto Nacional de Estadística.

En cifras absolutas, la partida que cada hogar isleño destina a pagar estos productos asciende a 14.311 euros, con lo que el proceso inflacionistas deriva en un encarecimiento de 2.300 euros al año. «Es un dinero que los hogares tendrán de menos para gastar en otros grupos de productos como enseñanza, vestido y calzado, comunicaicones, restaurantes y hoteles», apuntan desde el gabinete técnico de CC OO.

Precisamente este sobrecoste va a provocar una contención y caída en el consumo interno de las islas, como ya está empezando a constatarse. «Habrá hogares que podrán aumentar y cubrir ese mayor gasto pero los que no puedan lo que harán será reducir el consumo, quedando patente en cualquier caso la pérdida de poder adquisitivo y empobrecimiento de nuestra sociedad», se deja claro desde el gabinet técnico de CC OO.

En el caso de la vivienda, el promedio de gasto de un hogar canario era en 2021 de 7.378 euros; con la inflación se dispara ahora en 1.645 euros;. En el caso de los alimentos las familias canarias pagarán ahora casi 300 euros más; 300 euros abonará de más en el transporte y casi 50 en restaurantes y hoteles, hasta llegar al total de 2.343 euros anuales.

Las perspectivas para los próximos meses «no son nada halagüeñas» según la organización sindical, que prevé que el IPC podría situarse por encima del 10%.

Desde CC OO se advierte que la situación es especialmente «grave» en las islas no capitalinas donde los precios son más abultados, según pone de relieve el índice de paridades del poder adquisitivo. En una media regional de 100, Tenerife figura como la isla con la cesta de la compra más barata, con un 96, mientras que La Gomera es la más cara, con un 104.

Los datos de paridad ponen en evidencia la existencia de un coste de doble insularidad que padecen las islas no capitalinas y sobre todo las occidentales de El Hierro y La Gomera. «No se da cumplimiento efectivo, por tanto, a uno de los principios rectoresde nuestro Estatuto de Autonomía que es el fomento de la cohesión económica, territorial y social del archipiélago, garantizando la igualdad de derechos independientemente del lugar deresidencia», se apunta desde la organización sindical.

Por producto son las frutas frescas las que marcan la mayor diferencia, de hasta 22 puntos, siendo Lanzarote la más cara. A continuación se sitúan las bebidas no alcohólicas, las verduras frescas, el pan y los productos lácteos con más de 15 puntos de diferencia. El Hierro es la isla con los precios más elevados.

El presidente de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE), Agustín Manrique de Lara, se mostró convencido de que la inflación superará los dos dígitos en los próximos meses y abogó por una rebaja impositiva, a nivel nacional y autonómico, para tratar de contener la caída del consumo y «ayudar a las familias» liberando su renta.

Respecto a las voces críticas ante una bajada de impuestos, ya que podría provocar mayor inflación, Manrique explica que los precios no suben por un consumo disparado sino por el alza de costes y al bajar las tasas lo que se lograría sería mantener la demanda de las familias que empieza a caer por la inflación.

Manrique también consideró fundamental un pacto de rentas para compartir el impacto de la subida de los precios entre administraciones públicas, empresas y familias. «Confiamos en que las decisiones de las administraciones no tarden en llegar sobre todo en un momento en el que la recaudación está en cifras récord», apunta.

En sus palabras, «no tiene sentido el sufrimiento familiar y de las empresas cuando las administraciones públicas están cerrando con superávit a base de recaudar más».

En Canarias, según el presidente de la CCE, hay posibilidad de actuar sobre el IGIC (que grava el consumo) y el tramo autonómico del IRPF. «Lo que procede en estos momentos es diálogo para compartir el esfuerzo», indica Manrique.

Finalmente, respecto a la subida de los salarios, el presidente de la CCE aboga por alzas que no superen el 3% y nunca en base al 10% de inflación. «Estamos en una coyuntura en la que una mala actuación hipotecaría los próximos años», manifiesta. También considera clave una mejor eficiencia en la gestión de lo público.