La compañía realiza un 85% de sus contrataciones a proveedores locales

Estas cifras evidencian su compromiso sostenido en el tiempo con la economía de las Palmas de Gran Canaria y del resto del archipiélago. Un compromiso que ahora pretende incrementar dada la situación de dificultad e incertidumbre a la que se enfrentan muchas empresas locales como consecuencia de la crisis económica derivada de la sanitaria.

Estas adquisiciones, que se valoran principalmente desde una perspectiva técnica, pero sin olvidar la competencia de precios entre empresas, se traducen al final de cada año en más de 17 millones de euros que revierten en la economía regional. De esta cantidad, 2,2 millones de euros corresponden a pedidos superiores a 1.000 euros y el resto, 15 millones de euros, a contrataciones de obras o servicios.

La clave en la gestión de las compras para Emalsa está en la calidad del producto que se adquiere, pues su durabilidad debe estar garantizada para una eficiente gestión de los servicios. Y para que también la propia gestión de compras sea eficiente, la compañía cuenta con una oficina técnica de aprovisionamiento y contratación que centraliza las adquisiciones de las distintas áreas de actividad, aplicando criterios de la administración pública que garantizan la concurrencia.

Las adquisiciones se valoran fundamentalmente desde su perspectiva técnica, sin olvidar la competencia de precios, sirviéndose además de las ventajas que posibilita pertenecer a un gran grupo internacional.

Con esta estrategia y concretamente a través de la oficina técnica, Emalsa intenta establecer sinergias tanto con proveedores del grupo al que pertenece, Gestagua-Saur, como especialmente con empresas locales, lo que determina que no compre fuera de Gran Canaria nada que pueda comprar aquí, a igualdad de condiciones económicamente ventajosas para aquí», explica la empresa.