Anfi abre más de 5.000 grifos por semana como protocolo contra la legionela

El Grupo Anfi abre y cierra más de 5.000 grifos por semana como protocolo contra la legionela en sus complejos. La inactividad turística forzosa obliga a reforzar tareas de mantenimiento entre las que se encuentra las canalizaciones de agua fría y caliente o analizar los parámetros de sus piscinas. La empresa, que opera desde hace tres décadas en el sur de Gran Canaria, ha destinado un retén de trabajadores que se encarga de accionar toda la grifería de los hoteles, uno por uno, y dejar correr el agua durante cinco minutos para evitar presencia de legionela, ya que su inhalación puede provocar neumonía. Esta labor es imprescindible para garantizar la seguridad de los turistas cuando regresen de nuevo y es una constante desde que se decretara el estado de alarma. “Cuando acabas en una planta hay que seguir hasta la última para volver a empezar a la semana siguiente en una labor que se hace a mano”, explica Alejandro Monzó, director de Anfi Beach. Semanalmente se abren todos los grifos de las últimas plantas de cada bloque para que el agua el edificio circule en ducha, bañera, lavabo, jacuzzi, bidé y cocina. Se deja correr el agua a 60 grados y se suben los niveles de cloro en el circuito de aguas por encima de la media habitual. Otra de las acciones es la purga de los colectores en las salas de máquinas. Los colectores, que son las tuberías que reparten el agua por el complejo, se activan para evitar que el agua que pueda quedar estancada. Para todas funciones, Anfi cuenta con un retén de medio centenar de personas destinados a “ajustar una maquinaria que estará lista para arrancar cuándo lleguen los primeros clientes”. Una vez que se abran las puertas de los hoteles será cuando se redoblará aún más la limpieza y desinfección. “Nuestros protocolos de limpieza se verán incrementados con nuevos procedimientos en materia de desinfección y la rotación de limpieza en las zonas comunes se multiplicará”, sostiene Monzó.

La limpieza exhaustiva de la playa de Anfi del Mar, la reparación de las zonas comunes y la supervisión diaria de las instalaciones son algunas de la muchas tareas que hace cada jornada el personal de Anfi. El cuidado de los jardines, las piscinas y la inspección de las mil suites que conforman Anfi, junto a la actualización de la ropa de cama y baño son también otras de las labores que se llevan a cabo para la puesta a punto del complejo. “No queremos dejar nada suelto y trabajamos para dejar en condiciones idóneas la casa de vacaciones de nuestros socios y demostrar que Anfi sigue muy vivo”, concluye el director de Anfi Beach.

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