Moleiro ofrece sus credenciales para quedarse con los mayores (1-0)
pretemporada ·
El canterano anotó el único gol del encuentro ante el San Mateo, debutaron Mfulu y Sadiku a las órdenes de Pepe MelA velocidad de crucero. Así navega la UD Las Palmas con vistas al Valladolid. Los amarillos se impusieron a un aguerrido San Mateo en otro choque de manual de pretemporada donde, además, irrumpió Alberto Moleiro. El canterano anotó el único tanto del partido con un buen disparo y pide a gritos la ficha con los mayores.
El once inicial de Pepe Mel fue toda una declaración de intenciones. Un aviso con la mirada puesta en el debut liguero ante el Valladolid. Salió con todo el madrileño y no se guardó nada. Hasta Sergio Ruiz, después de pasar el coronavirus, se coló en el equipo titular. La pareja de centrales parece definida, con Navas y Ferigra por delante de Eric y Álex. Lemos y Benitos, dueños de los carriles. En el medio, acompañando al cántabro, un Loiodice que debe ser capital este curso y Maikel Mesa. Arriba, Pejiño en derecha, Peñaranda a la izquierda y Jesé en punta. Casi nada.
La pelota era amarilla y el San Mateo, desde el principio, intentaba enroscar el juego, peleando cada disputa con ímpetu. Galopes de Peñaranda por un lado, carreras de Sergio Ruiz por el medio y soberanía atrás de Raúl Navas. Pero no llegaba el gol mientras pasaban los minutos. Avisó Pejiño con un lanzamiento de falta y luego con otro intento por abajo. Maikel también lo acarició de cabeza en un saque de esquina botado por Lemos. Aguantaban los de Socorro, con mucho mérito, después de su histórico ascenso a la nueva Segunda RFEF.
Tras el paso por los vestuarios, Las Palmas subió una marcha. Insistió en la meta de Hormiga, que sacó a relucir reflejos en varias ocasiones. Maikel Mesa estampó su disparo en la madera y en el rebote Kirian no acertó a meterla en la red. Lemos y Enzo Loiodice habían probado fortuna desde lanzamientos de falta. En el minuto 60 saltaron al terreno Mfulu, Sadiku y Clemente. Los dos últimos fichajes debutaban de amarillo con ganas y mordiente. Luego, con el carrusel de cambios, Mel dosificó esfuerzos. Clemente falló una cantada a cinco para el final y se palpaba el empate hasta que apareció Moleiro, que mostró sus credenciales para quedarse con los mayores. El talentoso juvenil anotó el único gol del choque con un buen disparo con su pierna derecha.
Trianguló siempre bien la UD, que sigue engranando su máquina del fútbol. Debutaron Mfulu y Sadiku, que se apuntan a la cita de apertura ante el Valladolid. Y el once ya parece definido, con algún que otro matiz, claro está.