La metamorfosis de un Mika Mármol por el que la UD rechazó 15 millones de euros

Cuando uno es bueno, da igual donde le pongan. Ese es el caso de Mika Mármol, uno de los centrales españoles con mayor proyección de LaLiga y que estuvo cerca de poner rumbo a Italia a jugar la Champions con el Bolonia. Pero la UD se mantuvo férrea, pues no quería perder al catalán, que siempre ha sido indiscutible y uno de los pesos pesados sobre el terreno de juego.

Eso sí, este curso la vida parece haber variado para él. Mika ha cambiado en estos dos últimos encuentros el puesto en el eje de la zaga por el lateral izquierdo, donde ya jugó durante su periodo de formación en los filiales del FC Barcelona.

Ya la temporada pasada, a las órdenes de García Pimienta, fue indiscutible. Llegó algo justo a la primera jornada del campeonato, donde se sentó en el banquillo y luego lo jugó absolutamente todo. Solo se perdió un encuentro y fue por haber visto la doble amarilla contra el Granada. Y tan solo contra el Valencia no jugó los noventa minutos -disputó 82 el día de su debut-. Después nadie le sacó del campo.

Capital en la salida del balón, pero también en las recuperaciones, Mika Mármol participó en 36 encuentros ligueros y solo en dos de ellos actuó como lateral izquierdo. El resto los compitió como central y, casi siempre, al lado de un Saúl Coco que ya brilla con luz propia en la Serie A con el Torino.

Su estadística la campaña pasada, la 2023-24, le colocaron también en la prelista para los Juegos Olímpicos que finalmente acabó ganando la selección española. De media tuvo cuatro despejes por partido, una intercepción, dos entradas, cinco recuperaciones de balón, 63 pases completados por encuentro con un 89% de acierto.

Ahora, la llegada de McKenna ha hecho que Luis Carrión le mueva al lateral izquierdo, donde realizó un auténtico partidazo contra el Real Madrid en el empate (1-1) en el Estadio de Gran Canaria y también en la derrota frente al Alavés (2-0). El damnificado, por el momento, está siendo un Álex Muñoz que tampoco lo hizo mal en las dos primeras jornadas que jugó como lateral izquierdo. Para ese puesto, además de Muñoz, el técnico amarillo tiene también a su disposición a un Daley Sinkgraven inédito hasta el momento y a Benito, que puede usar como recurso, pero al que prefiere por delante como extremo.

Las prestaciones de Mika llevaron al Bolonia, que disputará la Champions League, a ofrecer 15 millones de euros por el zaguero de 23 años, pero en la UD nadie se planteó su salida al ser considerado como una de las piezas angulares del proyecto grancanario. El mercado se cerró y Mármol asumió que lo mejor para su presente es hacer otro gran año en la isla. Luego ya se verá, pero su polivalencia también le convierten en una carta muy cotizada para invierno.

Con todo, a Mármol le sobra calidad para moverse en cualquier parte del campo y, lo que está claro, es que sacarle de las alineaciones será complicado.

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