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I. S. Acedo / Las Palmas de Gran Canaria
Jueves, 1 de enero 1970
En el más difícil todavía, cuando parecía que el sueño de Vitolo era un imposible luego del anuncio de renovación por parte del Sevilla, el presidente de la UD Las Palmas, Miguel Ángel Ramírez, activó la maquinaria y obró el milagro. En permanente comunicación con el jugador y el Atlético de Madrid, Ramírez logró reactivar una operación en la que ya nadie creía después de que se diera por sellada la renovación del internacional hasta 2022 por la entidad del Sánchez Pizjuán.
Pese a que en Nervión proclamaban un acuerdo a falta de firma que se acabaría plasmanado, la realidad es que Vitolo se sintió molesto y enfadado con lo que entendió, precipitación por parte del Sevilla, a la hora de hacer pública su extensión de contrato y, contra pronóstico, rompió la baraja. Sin haber rubricado nada, entendió que nada había cambiado.
Tras varias conversaciones con su entorno y, certificada la intención del Atlético de pagar su cláusula de rescisión, el lunes por la noche viajó a Sevilla y ayer hizo lo propio a Madrid en un vuelo privado. Sin pasar por las oficinas del Sevilla, como se pretendía, ni realizar declaraciones a su llegada a la terminar ejecutiva del aeropuerto Adolfo Suárez, Vitolo quedó hospedado en un hotel junto a su padre y hoy, a primera hora de la mañana será abonada su cláusula de rescisión para quedar libre y fichar por el Atlético de Madrid.
Deberá madrugar porque ya se le han acabado las vacaciones y, en teoría, debería entrenarse a las órdenes de Berizzo en Sevilla, pudiéndose enfrentar a un expediente disciplinario. Una vez que se dé entrada en la Liga al importe que libera a Vitolo de su vínculo con el Sevilla, se procederá a anunciar su llegada a la UD, que lo tendrá cedido hasta enero por parte del Atlético, sobre el que pesa una sanción que le impide inscribir fichajes este año.
Ramírez se desplazó ayer a Madrid acompañado por Patricio Viñayo y en las próximas horas quiere volver ya acompañado por su flamante incorporación. Anoche todo eran felicitaciones cruzadas entre la UD, Vitolo y el Atlético de Madrid. Un bombazo nacional con doble beneficio. Regresa un ídolo y con plusvalía de casi 5 millones de euros, como estipuló una cláusula de futura venta cuando fue al Sevilla.Una jugada maestra.
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