Un partido en Yecla

Hoy ha jugado Las Palmas Atletico contra el Yeclano, equipo de la 2 división B, ahora luchando por no bajar a una de las nuevas «divisiones castigo» del fútbol español.

Llevo viviendo en Yecla, municipio del altiplano murciano, desde hace seis años y aunque conocía la buena fama de su afición y en especial de su peña «Curva Bar», no había entrado aún al campo de La Constitución, a ver jugar al Glorioso.

Pues nada, me he puesto mi chandal de la Unión Deportiva, y para el campo a ver a los muchachitos de mi tierra contra el Yeclano, que después de tantos años antes visitando y ahora ya viviendo en Yecla, también son los míos.

Las estrictas medidas anti Covid-19 reducen la asistencia al partido a mil personas y debemos rellenar un documento con nuestros datos e información médica de los últimos quince días.

Por eso, al entrar al campo, me voy directo a sentarme junto a los peñistas de la Curva Bar. Destacaba mi chandal azul y amarillo fosforito entre las camisetas y bufandas azulgranas de la afición yeclana que, antes, durante y después del partido, no dejan de animar a los suyos.

La Curva Bar es una peña conocida por tener dos sencillas reglas:

1. Se va al campo a animar al Yeclano.

2. No se va al campo a insultar al contrario o al árbitro.

¡Tan sencillo y tan grandioso!

¿Qué el Sr. arbitro «se equivoca» en una de sus decisiones? El grueso de la peña cantará, ¡¡¡Señor colegiado, usted se ha equivocado!!!, ¡¡¡Señor colegiado, usted se ha equivocado!!!

¿Qué durante el partido a alguien en la grada se le escapa un improperio? En segundos, varios de la peña le recuerdan que allí «se respeta a los chavales que vienen a jugar».

Termina el partido, gana el Yeclano 2 - 1, mucha alegría en la grada y tras unos minutos de cánticos al Yeclano empiezan todos a gritar: ¡Las Palmas, Las Palmas, Las Palmas, Las Palmas! Un homenaje que hacen a todos los equipos que vienen a jugar.

Por favor, dioses del deporte, ¡una peña Curva Bar en cada campo!

¡Arriba d'ellos y vamos mi Yeclano!