Examen de septiembre en Burgos
Un triunfo en cinco jornadas llena de obligaciones a la UD en El Plantío.
IGNACIO S. ACEDO
Burgos (Enviado especial).
Lunes, 20 de septiembre 2021, 02:00
No hace falta disimular, tampoco sería conveniente, la importancia que tiene para la UD lo que pueda pasar esta noche en El Plantío, una plaza de solera y que evoca al fútbol del siglo pasado, en el que su titular, el ya desaparecido Real Burgos, se paseó entre los grandes y fue el orgullo de la ciudad. Los tiempos han cambiado y, sin lugar a la nostalgia, el nuevo anfitrión, producto de la refundación, quiere volver a ponerse en el mapa y está en ello. Por lo pronto va dando la talla tras ascender el curso pasado y hoy no recibirá con alfrombra roja a Las Palmas. «Jugamos en nuestro campo y hay que marcar territorio», anunció, a modo de advertencia, Julián Calero, el entrenador local. A entusiasmo y sudor prometen batalla, ojo que también manejan recursos, por aquí el Valladolid se llevó tres, y eso tiene que poner sobre aviso al grupo de Mel, habitual carne de cañón como visitante pero que viene a lo que viene.
Las cuentas en la UD no cuadran luego de haberse escurrido nueve puntos de quince posibles. En zona de nadie en la clasificación, con cierto murmullo insatisfecho de fondo, técnico y jugadores saben que es inaplazable ganar, facturar tres puntos que traerían calma, optimismo y aires de esperanza. De ahí que el encuentro reúna una importancia mucho mayor de la prevista semanas atrás, cuando se manejaban escenarios de mayor comodidad del que se da ahora. Un examen en toda regla que, por encima de la estética, debe saldarse con bienes tangibles en la tabla. Y es algo que se asume con la responsabilidad propia de un proyecto llamado a mayor altura y que requiere del mejor pegamento posible y que solo dan las victorias.
Por encima de los peligros de un Burgos que pondrá nervio y orgullo, sin desmerecer su catálogo de cualidades, Mel insiste que los suyos sean reconocibles. Esto es, iniciativa, intensidad, gestión vertical, concentración, efectividad, orden... Libra por libra no se discute que la UD está por encima de la mayoría de los integrantes de la categoría y ni qué decir del oponente que ahora le toca en suerte. La cuestión no es tanta la publicitaria como la empírica. Demostrarlo. A unos kilómetros de donde durmió anoche, en Miranda de Ebro, hace bien poco le dieron un meneo de cuidado (4-2) y por pecados relacionadas con la actitud. Tan imperdonable como aleccionador.
Toca, por tanto, pitar fuerte y eso pasa por una victoria, por mucho que la misión se encarezca con dos bajas de cuidado. Se contaba ya con que Raúl Navas seguiría en la reserva por esas molestias que no terminan de remitir, pero la orfandad de Sergio Ruiz ya es una vuelta de tuerca excepcional. No ha podido llegar a tiempo el todocampista cántabro, lo que deja un boquete en la zona ancha que habrá qué ver de la manera en la que se resuelve. Hay futbolistas para el puesto pero ninguno alcanza a Sergio en resolución, equiparable a Viera en su valía y liderazgo para el colectivo. Aunque se sugirió la opción de comparecer de entrada con tres centrales, apostar por Álex Suárez o Coco, ambos inéditos, parece demasiada aventura cuando lo que se precisa son piernas adiestradas.
De ahí que gane fuerza una línea de cuatro, mayormente la misma que intervino ante el Ibiza nueve días atrás, con Mfulu como ancla por delante y por resolver el corte del futbolista que le acompaña, más adelantado que el resto Loiodice, habitual en la foto aunque venga de quedarse fuera de la última jornada. La pujanza de Moleiro, goleador salvador, le da enteros para colarse entre los elegidos y no se le descarta. Antes de estrenar ciclo internacional con la sub-19 el tinerfeño ya se había hecho sitio y tal y como está ni se le tose. Pero tanto Viera como Pejiño están para seguir y Jesé sigue teniendo cara de titular pese a que se anunció tiempo atrás que habría ocasiones en las que ejercería de bala de oro en las segundas partes. No caben todos. Así, el venezolano Peñaranda puede ser el sacrificado. A Mel le pagan también para tomar decisiones y le toca elegir.
Con recursos de sobra, hay que acertar el tiro. Espera un partido bravo. Ahí va la UD.