«Nadie nos va a parar», la apuesta de la Sala Insular por mantener su esencia

«Nadie nos va a parar», subraya Gonzalo Ubani. El mensaje del director artístico de la Fundación de las Artes Escénicas y la Música de Gran Canaria interpela directamente a la pandemia, a la que desafía con la cultura y como muestra esta la programación de la Sala Insular de Teatro, que arrancará el fin de semana del 23 y el 24 de octubre con la interpretación del 'Prometeo Encadenado' de Profetas del Mueble Bar.

El centro escénico de Primero de Mayo muestra en la confección de la programación esa versatilidad que emana de las posibilidades que ofrece la sala. Habrá, por naturaleza, mucho teatro. Pero el espacio del Cabildo de Gran Canaria también dará cobijo a propuestas de danza, música o espectáculos infantiles con la presencia de eventos como el FEX, Jazz Otoño o el ciclo No Solo Autor.

Para el responsable artístico de este espacio que oficia de «complemento» al Teatro Cuyás está programación representa «el esfuerzo enorme de todo un equipo que trabajo haciendo todo lo posible por seguir adelante como si no ocurriera nada. No somos unos locos y está todo bien pensando y medido, sabemos la realidad del lugar en el que vivimos, pero teníamos claro que íbamos a desarrollar la actividad ajustándonos al aforo que sea posible», indicó.

Precisamente sobre la capacidad de recibir espectadores que va a tener durante esta temporada la Sala, Ubani se mostró irónico. «Cuando pregunté cuánto público podría haber en el Cuyás y me dijeron que poco más de 200 espectadores por la SIT ni pregunté (ríe). Creo que será poco más de medio centenar de espectadores en principio», señaló.

Tras el estreno de Profetas, compañía que cumple cuatro décadas de actividad en los escenarios, será el turno de la música con el Festival en Conexión durante el fin de semana del 30 y el 31 de octubre con los conciertos de The Bucannans. El Charco y Nimañana y la llegada de Jazz Otoño durante el mes de noviembre con la propuesta de Susana Sheiman y Chano Gil Quartet.

Los programadores destacan que se mantienen las residencias, tres de danza y dos de teatro, y la presencia en la oferta de la Sala de dos obras que «van mucho más allá del teatro». Ubani se refiere de esta forma a 'The Room To Be', de Burka Teatro, y a 'Boira', un montaje de Mario Vega con las actrices Marta Viera y Ruth Sánchez. Dos textos de un enorme compromiso social que forman parte de la propuesta escénica de la sala.

Guacimara Medina, consejera de Cultura del Cabildo de Gran Canaria, destacó que es una programación que «mantiene la esencia de este espacio con propuestas arriesgadas y atractivas». Además, quiso poner en primer plano al equipo de trabajo que ha desarrollado la temporada por su voluntad de imponerse a los condicionantes de la Covid-19. «Lo fácil hubiera sido quedarse quietos y decir que no se podía hacer nada. Pero han sido muy ambiciosos», sentenció.

Ubani quiso reivindicar el valor de la SIT como un lugar en el que se pueden desarrollar propuestas artísticas singulares. «Cuando viene gente de la península me dicen que ojalá ellos tuvieran un lugar así. Es una sala ideal en la que se pueden cumplir los deseos de cierto tipo de creación. En la que se puede llevar el espectáculo al patio de butacas o iluminar desde cualquier lado», manifestó el responsable artístico.