La Virgen del Pino bajará en 2025 a la capital y visitará Telde y Santa Lucía por primera vez

Los rumores de que la Diócesis de Canarias iba a anunciar una nueva Bajada de la Virgen del Pino en el día grande de los festejos se cumplieron este domingo. La novedad la desveló el obispo auxiliar, Cristóbal Déniz, y no el obispo, José Mazuelos, durante la homilía. Lo hizo en el momento en el que la solemne eucaristía estaba a punto de culminar.

Así, en 2025, coincidiendo con el Jubileo, la imagen de la patrona volverá a la capital grancanaria, a la catedral basílica de Canarias, al igual que lo hizo en 2014, pero en esta ocasión se trata de un hecho histórico ya que también visitará la Basílica de San Juan de Telde para reencontrarse con el Cristo 25 años después, así como a Santa Lucía de Tirajana, concretamente a la parroquia de San Rafael Arcángel, en Vecindario. Se trata de la primera vez que acude a estos dos municipios.

Déniz puntualizó que los actos y celebraciones litúrgicas que se desarrollarán durante la próxima Bajada, la 52ª de la imagen de la Virgen del Pino a la Catedral de Las Palmas, se publicarán oportunamente, aunque se estima como fechas posibles los últimos días de mayo y las primeras semanas de junio del próximo año.

«Deseamos que este encuentro de la Virgen del Pino con su gente sea una oportunidad para expresar el valor y la adhesión a nuestra tradición religiosa, así como a renovar nuestro compromiso con los valores del Evangelio», expuso Déniz tras la homilía del obispo y momentos antes de que la imagen de la patrona de la Isla emprendiera la procesión por las calles de la Villa Mariana, para estar así más cerca de sus fieles.

Tras hacer pública la noticia, que no era novedad para el alcalde de Telde, Juan Antonio Peña, expresó que había mediado con el obispo, José Mazuelos, para que se produjera este hecho único en el municipio, aunque lo hizo para que pudiera realizarse en el 675º aniversario de la fundación de la ciudad, en 2026. Aún así entiende que se haga coincidir con el año jubilar para esta visita, cuando además se cumple otra efemérides, el 25º aniversario de otro Jubileo en el que el Cristo de Telde visitó la capital grancanaria para el encuentro con la Virgen.

De esta forma, da casi por hecho que también tendrá que haber una Bajada especial del Santo Cristo para encontrarse con Nuestra Señora del Pino. Aunque no se ha especificado públicamente, la imagen pasará dos noches en la ciudad.

Peña aseguró que «este acto simboliza la unión de dos devociones profundas y arraigadas en la cultura canaria y se espera que atraiga a miles de fieles de todas partes». En este sentido, este acontecimiento influirá en mejorar el empleo, la restauración y el bueno nombre de Telde, añadió. «A pesar de que es un acto religioso, detrás existe muchos servicios que se van a beneficiar de esta visita», resumió.

En la misma línea se pronunció el alcalde de Santa Lucía de Tirajana, Francisco García, ya que aseguró que es «un honor y un orgullo, con la fe que profesa la imagen de la Virgen del Pino, que visite la localidad de Vecindario», y lo hará a principios de junio, donde permanecerá dos noches.

El regidor explicó que desde la Diócesis le trasladaron que se había tomado esta decisión debido a la numerosa población que tiene el sureste y que hasta ahora nunca se había visitado. Tras el histórico recorrido que hizo la imagen en 2019 por los municipios del interior de Gran Canaria con motivo de los incendios, ahora se desplazará al este de la isla por primera vez.

Las autoridades eclesiásticas y locales ya se encuentran trabajando de manera coordinada en los preparativos. La noticia ha generado una gran expectación entre los devotos y habitantes de la Isla, quienes ya se preparan para recibir a la Virgen del Pino otra vez en la capital, así como por primera vez tanto en Telde como en Vecindario.

El Obispo de la Diócesis de Canarias, José Mazuelos, pidió durante la homilía en Teror, en el día grande de los festejos por el Día del Pino, un trato digno a los migrantes y que no sean utilizados como armas reivindicativas. Ante el drama que supone el problema de la migración «también tenemos que escuchar la voz de Jesús y tener presente que esa agua amarga y salada del Atlántico se puede convertir en el vino de la fraternidad y la comunión cuando se respete la dignidad de todas las personas», sostuvo.

Por ese motivo, «es ese respeto el que nos lleva a denunciar las políticas populistas y alarmistas que alimentan temores entre la gente. Es esa dignidad la que obliga a no usar a las personas migrantes y a los menores como armas reivindicativas«, reclamó.

«Es el amor a los pobres el que nos obliga a buscar soluciones entre todos para que el desierto y el océano atlántico dejen de ser cementerios para tantos. Es por ello que hay que favorecer ayudas y conciertos con los países de origen para facilitar una inmigración ordenada, solidaria y justa. Como afirma el papa Francisco, «el problema de la migración empezará a tener solución cuando se amplíen las rutas de acceso seguras y las vías de acceso legales para los migrantes, cuando se facilite el refugio a quienes huyen de la guerra, de la violencia, de la persecución y de tantas calamidades. Lo conseguiremos» –nos dice- fomentando por todos los medios una gobernanza mundial de la migración basada en la justicia, la fraternidad y la solidaridad«, añadió.

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